Desde hace muchos años todos los ordenadores portátiles y tabletas tienen una cámara frontal para poder hacer videollamadas. Aunque suelen ser suficientemente buenas, la verdad es que a menudo dejan mucho que desear en cuanto a calidad de imagen cuando las comparamos con la cámara de un iPhone. Incluso el nuevo monitor Studio Display de Apple tiene una cámara con una calidad de imagen que ha decepcionado a muchos usuarios y que Apple está intentando solucionar mediante actualizaciones de software. ¿Cómo solucionar este problema? – puedes comprar una webcam USB, pero las buenas son bastante caras. Sin embargo es posible que ya tengas una buena cámara en casa, que no estás utilizando. ¿Dónde? – en un iPhone que hayas dejado de utilizar, más antiguo, pero con una cámara de mucha mejor calidad que la de tu portátil o monitor. Ahora, es posible utilizar esa cámara en tus videollamadas de manera totalmente gratuita. En este artículo te explicamos cómo.
La aplicación que debes utilizar se llama Camo. Te permite utilizar la cámara frontal o cualquier de las traseras de un iPhone, de manera que sólo tienes que encontrar la manera de mantenerlo mirando hacia ti con esa cámara. Hay usuarios que han conseguido hacerse un soporte para su monitor con piezas de LEGO, de esta manera.
Dónde poner el iPhone de manera que se quede quieto es probablemente el problema más grande que hay que solucionar cuando se utiliza Camo, pero aparte de eso el resto de pasos a seguir son bastante sencillos. Basta con instalar la App en el iPhone y luego la aplicación en tu Mac o PC desde su web oficial. Instalar la aplicación en Mac te hará pasar por una serie de configuraciones de seguridad para dar permisos que permitan a la App encontrar tu iPhone conectado con su cable USB al ordenador.
Una vez tengas la App instalada, verás la cámara de Camo como una cámara más disponible en tu sistema para cualquier aplicación como Teams, Meet, Skype, etc – todas podrán utilizar esa cámara, que mostrará cualquier cosa que elijamos con la cámara del iPhone.
Después, basta con abrir la App de iPhone con el terminal conectado con su cable USB-Lightning a cualquier puerto USB de tu Mac o PC, y elegir la cámara que queremos utilizar. Ya está – es así de sencillo. Al bloquear el iPhone, le quitamos el acceso a la cámara a Camo, de manera que eso funciona como un botón de privacidad para la cámara, que no podrá utilizada. Hay que dejar el iPhone conectado y encendido (desbloqueado) para que Camo pueda acceder a la cámara.
Si quieres que ese iPhone siempre arranque automáticamente la App de Camo al encenderse y que sólo se pueda utilizar esa App, de manera que si se queda sin batería al encender el ordenador arranque también el iPhone y esa App automáticamente, puedes utilizar el configurador de Apple y ponerlo en modo quiosco, es decir, modo de App única, que se arranca cuando el iPhone se enciende, y nunca pide contraseña para desbloquearse. En el configurador de Apple esta posibilidad aparece como Single App Mode, o modo de App única. Encenderse, arrancar iOS y luego esa App es lo único que haga ese iPhone. Con esta configuración, sólo hay que conectar el iPhone con su cable para que la App de Camo arranque y haga de servidor para la aplicación de Camo en tu ordenador.
Esta última configuración es totalmente opcional porque siempre puedes abrir la App de Camo en el iPhone manualmente. Es sólo una elección para los que no piensan utilizar ese iPhone para ninguna otra cosa.
Por supuesto, una vez que tengamos todo funcionando es posible editar la imagen en tiempo real para cambiar contraste, color, añadir efectos etc. La versión gratuita de Camo permite utilizar el iPhone como cámara indefinidamente, pero la resolución estará limitada a 720p, que es más que suficiente para ser utilizada como cámara de alta calidad en cualquier videollamada. Si queremos más resolución, hay que pasar por caja, pero muy probablemente ese vídeo 720p de muy alta calidad que sale de tu iPhone será más que suficiente en la inmensa mayoría de casos.