iOS es en general un sistema muy estable, pero como todos los demás sistemas operativos, no es perfecto. En ocasiones puede tener problemas y sobre todo en ciertas circunstancias es posible encontrarse con un iPhone que no se enciende nada más de sacarlo del bolsillo, da igual cuántas veces pulsemos el botón de encendido o Home… la pantalla se quedará en negro.
Hay varias razones por las que esto puede ocurrir. La más habitual es obviamente que el iPhone se ha quedado sin carga en la batería, o porque tiene una batería que ha terminado su ciclo de vida. Pero también ocurre cuando sabemos a ciencia cierta que la batería tiene carga suficiente para encender el iPhone sin problemas. En estos casos, estamos ante un sistema que simplemente se ha colgado, es decir, se ha quedado bloqueado porque alguno de los procesos que funcionan en segundo plano en iOS impide al los que se encargan del encendido y pantalla de bloqueo funcionar debidamente.
La única manera de solucionar el problema llegados a este punto es forzar un reinicio de todo el sistema operativo. Esto se puede conseguir manteniendo pulsados el botón de encendido y el botón Home al mismo tiempo durante más de diez segundos. Tras hacer esto, el iPhone (o el iPad / iPod touch, siguiendo el mismo procedimienot) se reiniciará y veremos en pantalla el logo de Apple.
Tras un tipo de cuelgue del sistema de este tipo, en el arranque, iOS hace una serie de comprobaciones que hará que el proceso sea bastante más lento del habitual. El iPhone tardará bastante más en mostrar la pantalla de bloqueo.
Una de las principales razones por las que el sistema se puede quedar colgado es la falta de espacio de almacenameinto disponible. Menos de 1 GB libre puede dar lugar a ralentizaciones y también puede activar los sistemas automáticos que liberan espacio eliminado ficheros temporales guardados en muchas Apps. Algunos usuarios, incluso fuerzan esta situación descargando algo muy pesado, como por ejemplo una película, y así obligar al sistema a liberar un espacio que de otra manera seguiría ocupado. Cuando a pesar de todo el espacio disponible es escaso, es relativamente habitual que el sistema se quede bloqueado con la pantalla apagada, y se quedará así, generalmente con un ligero calentamiento notable en la parte trasera del iPhone, hasta que lo reiniciemos con el método descrito. Si no lo hacemos, continuará así hasta que la carga de la batería se agote por completo, y cuando lo volvamos a poner a cargar, arrancará normalmente. Esa es la otra manera de reiniciar iOS