Ayer os contábamos acerca de la famosa herramienta de diseño Figma, cómo su IA copiaba la App del Tiempo de Apple en la mayoría de ocasiones que se le pedía ayuda en el diseño de una App de este tipo. Hoy os contamos que su CEO, Dylan Field, ha decidido retirar esta nueva herramienta basada en IA porque hay que ajustarla, según cuenta en TechCrunch.
Más que un ajuste, a nosotros nos parece que lo que necesita es un banco de datos o imágenes mucho más variado y amplio y sobre todo, y esto es muy importante, muchas más pruebas. Estos días en los que hasta los retretes deben tener IA para que la gente los compre, parece que la carrera de todas las empresas es sacar su propia IA como sea. Las llamamos IAs porque todo el mundo las está llamando así, aunque como ya hemos explicado en repetidas ocasiones, no se trata de inteligencias artificiales como tal. El propio término es difícil de delimitar, porque para algunos especialistas engloba todas las técnicas de machine learning o modelos de lengua o acción grandes (LLM) y para otros significa lo que llaman singularidad, que será la IA que realmente demuestre ser consciente de su propia existencia, algo a lo que aún no hemos llegado. Lo cierto es que ya en los años 80, cuando los ordenadores de 8 bits como el Amstrad CPC, el MSX o el Spectrum reinaban en España y muchos otros países europeos, y cuando el Commodore 64 era el ordenador más vendido en EEUU, ya se publicaban muchos libros sobre inteligencia artificial. Llamaban así a cualquier programa ligeramente más complicado o incluso llamaban así al comportamiento programado de jugadores de fútbol en un videojuego. El término inteligencia artificial lleva décadas siendo prostituido y ahora que todo tiene modelos de lenguaje grandes integrados, lo llaman IA, pero realmente se trata de programas que funcionan de una determinada manera, prediciendo lo que continúa a un paso, ya sea una palabra, o una imagen, o en este caso de Figma, un elemento de diseño.
En Figma tienen ahora la tarea de volver a entrenar su IA y después probarla como es debido dejando las prisas que causa la presión de tener una IA en tu producto a un lado, y el resultado debe ser muy bueno porque ahora que ha ocurrido esto, todos van a mirar con lupa el resultado. Especialmente desde las oficinas de Apple.
