La Competitions and Markets Authority (CMA), un organismo gubernamental del Reino Unido, ha anunciado que están investigando la situación de las políticas sobre navegadores y juego vía streaming de Apple y Google. Esto quiere decir que, si todo sigue adelante, en el futuro podría haber leyes que obliguen a Apple a hacer dos cosas que ahora mismo no quieren hacer: Permitir otros motores de render de páginas web además de Webkit, y permitir también que haya Apps de juegos en la nube, es decir, ejecutados remotamente sin su supervisión, y vistos en el iPhone, iPad o Mac remotamente, vía streaming, como si fuera Netflix.
Muchos usuarios no son conscientes de esto, pero aunque tenemos la posibilidad de instalar por ejemplo Chrome en un iPhone, en realidad ese navegador no es como Chrome para ordenadores (incluyendo Macs). El motor que pinta las páginas en pantalla, es Webkit, es decir, el mismo que Safari. Todo lo que hay alrededor de eso, como el sistema de solapas, los marcadores, la sincronización mediante cuentas de Google etc sí que pertenece al ámbito de Chrome y la propia Google, pero las páginas que vemos en pantalla aparecen con el mismo motor que las de Safari. Lo mismo se puede decir de cualquier otro navegador, y de las vistas webs que podemos ver dentro de una App.
Apple obliga a utilizar sólo un motor de render de webs en cualquier navegador web alegando problemas de seguridad. Los motores que se encargan de interpretar el código HTML, CSS y JavaScript con el que están hechas las webs, es uno de los principales agujeros de seguridad. En el caso de iOS, está integrados+ en el sistema operativo, Son muy complejos, y tienen muchos componentes en los que encontrar vulnerabilidades. Esto es así desde hace muchos años, y no es algo exclusivo del iPhone o de Apple. Por ejemplo, la PlayStation 3 se puede piratear gracias a un problema en el motor de render de su navegador web. Apple quiere ser la responsable de ese motor para actualizarlo cuando encuentran vulnerabilidades y así garantizar la seguridad del iPhone en la medida de lo posible. Si permitieran otros motores web en iOS, no podrían hacer nada hasta que esa empresa actualice la App de ese navegador web. Podrían eliminarla de la App Store hasta que eso ocurra, pero la administración de todo esto requeriría de continuas retiradas y regresos en la App Store, y los usuarios que ya tengan la versión antigua de ese navegador instalado todavía podrían ser vulnerables durante un tiempo, incluso si la App se actualiza, aunque lo mismo se podría decir de iOS como sistema operativo, incluyendo Webkit. Es un gran problema, en el que Apple ha tomado esta decisión y que ahora podría verse obligada a cambiar.
Además del motor que pinta las webs, otro de los aspectos en los que van a investigar lo que hacen Apple y Google tiene que ver con los juegos vía streaming, es decir, juegos en la nube que se ejecutan en máquinas remotas y que se pueden ver en la pantalla de un iPhone o de un iPad como si uno estuviera viendo Netflix, con los controles del usuario enviados a esos servidores. La respuesta puede ser tan rápida si se tiene una buena conexión a Internet que para muchos usuarios es la solución perfecta para tener sus juegos disponibles siempre en cualquier lugar, con la calidad que sólo las tarjetas gráficas más potentes y caras pueden ofrecer, sin necesidad de invertir una cantidad indecente de dinero en comprar una. Al mismo tiempo, muchos gamers no gustan de esta opción porque siempre habrá más lag (retraso entre lo que hace el usuario y lo que se representa en pantalla) pero eso es un debate para otro artículo. En este, os contamos acerca del a negativa de Apple a permitir este tipo de juegos o servicios en la App Store.
La razón es simplemente que no pueden controlar ese contenido. Si el juego se actualiza, lo hace remotamente. Eso puede traer nuevos contenidos no permitidos por las reglas de la App Store, y Apple no podría comprobarlos. Además de eso, tampoco podrían llevarse ningún dinero en comisiones por pagos integrados.
Estas dos reglas, pueden limitar la libre competencia, quitando oportunidades a empresas que no pueden acceder a todos los usuarios de iPhone o Android, por ejemplo. Es el caso de Epic Games con Fortnite, que fue retirada de la App Store al haber incumplido con las reglas al poner a disposición del usuario un medio de pago alternativo al que ofrece Apple en su plataforma, de manera que no tuvieran que pagar ninguna comisión. Ahora Fortnite está disponible vía streaming y por esa razón se puede jugar bastante bien con controles táctiles o un mando Bluetooth desde Safari. Pero es desde Safari, el navegador web, en donde Apple no puede hacer nada para prohibirlo. Eso sí, una App que abra ese mismo streaming de vídeo en la App Store, no sería permitida. Apple ha propuesto a empresas como Microsoft o Sony publicar la App en la App Store pero obligando a que sea una para cada juego, en lugar de una especie de App Store dentro de la App Store, y además, actualizando la App para cada actualización remota del juego. Una situación bastante absurda que por ahora no ha aceptado nadie.
Teniendo en cuenta todo esto, no sería nada sorprendente que por Ley obliguen a Apple y Google a permitir cualquier motor web y a permitir Apps de juegos en la nube en la App Store. Esta presión en el Reino Unido se une a la de Países Bajos o Corea del Sur en torno a las comisiones que se cobran a los desarrolladores y a los métodos de pago que se permiten o no. En la Unión Europea también quieren obligar a Apple a utilizar un conector USB-C en el iPhone. De una manera u otra, Apple se va a ver obligada a cambiar muchas de sus reglas en muchos países, porque este tipo de casos no paran de aumentar en todo el mundo, mucho más que antes. Es sólo cuestión de tiempo que Apple se vea obligada a ceder en muchos aspectos.