En iFixit, después del vídeo a modo de teaser, han publicado por fin todas las imágenes del interior del iPhone 13 Pro en alta resolución. En este artículo puedes ver las que consideramos más importantes, y pulsando sobre cada una de las imágenes es posible abrirla a su resolución completa, en toda su gloria, en una nueva solapa. Ahí podrás apreciar cada pequeño detalle como si tuvieras una lupa enorme encima de los componentes. Así, podrás saber lo que hay exactamente dentro del iPhone 13 y cómo ha hecho Apple exactamente para conseguir meter una batería más grande, de más capacidad, a pesar de tener también dentro un conjunto de cámaras traseras que es mucho más grande también.
Pero vayamos por partes, nunca mejor dicho. Lo que ves sobre estas palabras, es la vista con rayos X del iPhone 13 Pro Max y 13 Pro normal. El diseño es básicamente el mismo en ambos, aunque con una batería y pantalla significativamente más grande en el Pro Max. El Taptic Engine, el motor de vibración que te hace sentir que pulsas un botón o te avisa de una llamada, es más pequeño, como vimos antes. Pero no es la única manera en la que Apple ha conseguido más espacio para la batería.
Como curiosidad aquí podemos ver el iPhone 12 Pro (a la izquierda) y el 13 Pro (a la derecha), que se levanta por encima claramente. Es por el módulo de cámaras traseras, mucho más grande, y también más alto que nunca antes. Por eso se nota tanto la diferencia. Las cámaras traseras del iPhone 13 Pro son realmente mucho más grandes.
Abriendo el iPhone 13 Pro al lado de un iPhone 12 Pro, podemos ver que su batería tiene forma de ele para aprovechar mejor el espacio. Al contrario que en alguna generación anterior, la batería en esta ocasión está formada por una sola celda, es decir, no son dos baterías conectadas en serie, sino que simplemente han construido una batería con esa forma para aprovechar todo el ancho del terminal en esa zona.
Por cierto, es curioso ver cómo este año han puesto A15 BIONIC en la pegatina protectora del escudo contra señales de radio que protege el homónimo SoC (System on Chip). Hasta ahora sólo aparecía en el propio chip, al retirar este protector, y no siempre. Ahora podemos ver dónde está el A15 nada más abrir el iPhone 13 Pro.
Al abrir el iPhone 13 Pro hay que tener mucho cuidado con un cable flex que va desde la pieza de la pantalla hasta la placa base, porque es realmente muy corto. Si tiras muy fuerte o levantas demasiado la pantalla, podrías romperlo irremediablemente, y eso tiene una solución muy cara, que es una pantalla nueva.
El tamaño del módulo de cámaras traseras es sorprendente. Son realmente mucho, mucho más grandes las del iPhone 13 Pro que las del iPhone 12 Pro. Esto es debido a unas lentes más grandes, que están encima de unos sensores también mucho más grandes que antes. Esto significa más luz en su interior, y considerablemente mejores fotos, sobre todo en condiciones de poca luminosidad, como fotos nocturnas o en interiores, que ahora serán más claras, son menos ruido o menos movidas que antes.
Las baterías, son también bastante diferentes. La capacidad de la batería del iPhone 13 Pro supera los 3000 mAh por primera vez. La del iPhone 13 Pro Max supera los 4000 mAh también por primera vez en la historia del iPhone. Aquí tienes todas las capacidades de batería del iPhone 13 y del iPhone 12 comparadas, en todos sus modelos.
La placa base (o logic board, como Apple la llama) tiene el diseño tipo sandwich que debuto con el iPhone X a finales del año 2017. Son en realidad dos placas base conectadas entre ellas por un enorme y larguísimo conector que Apple sitúa en los bordes de las mismas. El borde hace de contacto entre una y otra. Esto, unido al hecho de utilizar varias capas en cada una de estas placas, hace posible que podamos interconectar decenas de miles de buses entre los chips y componentes, que en su mayoría se encuentran en el interior. El A15 Bionic se encuentra en la parte exterior, mirando hacia la pantalla, para disipar mejor el calor que puede generar. Tiene 6 GB de RAM en este caso, con una GPU que tiene un núcleo más llegando a 5, en cada una de sus capas internas, colocadas una encima de otra. En el caso del iPhone 13 normal, tiene 4 GB de RAM y un núcleo menos en su GPU, dejando el total en 4.
Por debajo, mirando al lado que da a la parte trasera del iPhone, apenas hay componentes, ya que ahí se sitúa también parte de la bobina de carga inalámbrica.
Entre las dos placas, podemos ver en rojo el chip de memoria Flash de almacenamiento, de Kioxia (es decir, Toshiba). En naranja y amarillo los chips de Qualcomm para el módem 5G (derecha) y radio (izquierda). Es un SDX60M.
Aquí podemos ver el módulo de los componentes TrueDepth que hacen posible que Face ID funcione. Esto se encuentra justo en la pestaña o solapa en la parte superior de la pantalla. Por primera vez, Apple separa este módulo del de la pantalla, de manera que ahora se puede reemplazar sin tener que cambiar la pantalla también. Eso sí, si la pantalla es diferente, a pesar de ser un módulo separado, Face ID no funcionará. Hace falta tener las herramientas de calibración y flasheado de firmware para poder emparejarlas y que funcionen juntas, como cualquier iPhone que venga de fábrica. Esto dificulta muchísimo las reparaciones a centros no afiliados con Apple, que no reciben ni la formación ni las herramientas de la compañía, y a menudo, tampoco las piezas originales.
Aquí podemos ver cómo el emisor de luz infrarroja y el VCSEL son ahora un único componente, cuando antes eran dos. Además de recolocar el auricular mucho más arriba, justo al borde del iPhone, haber reducido estos dos componentes a uno solo ha permitido a Apple hacer esa solapa sobre la pantalla un 20% más pequeña que en modelos anteriores de iPhone.
Estas son todas las piezas que conforman un iPhone 13 Pro. Desde luego, no se puede decir que sea fácil diseñar y construir uno de estos dispositivos, y se nota que hay muchísimos especialistas en Apple que no sólo saben muy bien lo que hacen, sino que además trabajan muy duro para conseguir este nivel de integración y de miniaturización.
