Tal y como dicta la ley en Francia, Apple ha empezado a mostrar el índice de reparación, o quizás mejor dicho, el índice de reparabilidad, que es básicamente una puntuación de cero a diez que indica lo fácil o difícil que es reparar un producto electrónico.
Apple además tiene una página (traducción automática de Google) en la que enlaza a cada uno de los modelos de iPhone y Macs que tienen esta puntuación.
Por ejemplo, el iPhone 12 Pro Max tiene un índice de reparabilidad de 6 sobre 10.
Curiosamente, el iPhone SE de segunda generación tiene un índice de reparabilidad más alto, de 6,2 sobre 10.
Nos gustaría mucho que Apple trabajara más en mejorar este índice de manera que todos sus productos sean más fácilmente reparables. Por ejemplo, si evitan utilizar pegamento para mantener la batería en su sitio, o si no cometen atrocidades como que la batería y teclado de los MacBooks más recientes vayan totalmente juntas, obligando a cambiar el teclado si cambias de batería, y viceversa. Es sencillamente demencial, y un daño evidente al medioambiente, ese que en Apple tanto se jactan de proteger.
Muy bueno el paso que han dado los legisladores franceses obligando a todos los fabricantes de dispositivos electrónicos a indicar esta puntuación. Quizás si Apple se ve obligada a mostrar este índice en más países, empiece a invertir más esfuerzo en conseguir que el iPhone, además de ser bonito y funcionar bien, también sea más fácil de reparar.