Ayer os contamos cómo Apple aceptaba un acuerdo con Qualcomm que pone fin a sus disputas judiciales, pagándoles un dinero y de alguna manera aceptando una derrota. Además, han firmado un acuerdo de seis años para utilizar sus chips de módem, imprescindibles en cualquier smartphone.
Ahora, Intel anuncia que sale del negocio de la fabricación de chips de módems, lo que significa que no habrá más modelos de iPhone que tengan un módem de Intel en años sucesivos.
Viendo las dos noticias, publicadas con tan poca antelación entre una y otra, nos hace imaginar lo que podría haber ocurrido; Básicamente, Apple se ha quedado sin proveedor de chips de módem, y ante esa situación, Qualcomm es la única empresa que les puede ayudar en el futuro. Por esa razón, no les queda más remedio que aceptar las condiciones, bajar la cabeza y pasar por caja. Así, el futuro de los chips de módem del iPhone, se esclarece y les permite seguir trabajando. Quizás ha sido al revés; Apple ha decidido utilizar módems de Qualcomm en el futuro y al perder un pedido de componentes tan grande, es posible que Intel haya determinado que no es rentable para ellos esto de invertir en chips de módems, sobre todo ahora que llegan las nuevas redes 5G. Sin embargo, nos inclinamos por esa primera opción… porque a Apple, le gusta diversificar un componente tan importante y con Qualcomm, a pesar del acuerdo, no se llevan muy bien. No están contentos con ellos, y piensan que están pagando cantidades injustas de dinero que no corresponden a esa empresa. Lo piensan en Apple, y en el resto de la industria. Quizás, lo que ha ocurrido es simplemente que Intel no ha conseguido diseñar un chip de módem 5G que satisfaga a Apple, incumpliendo hitos en su desarrollo y poniéndoles nerviosos.
Un chip de módem es imprescindible porque es el sistema que permite a un smartphone, tableta u ordenador conectarse a antenas de telefonía móvil. En estos chips existe un pequeño ordenador independiente del resto del sistema, que arranca con su pequeño sistema operativo, tiene su CPU, RAM, ROM y almacenamiento, como cualquier otro ordenador. En la industria se llama baseband, y permite administrar la tarjeta o tarjetas SIM, autorizar conexiones, determinar velocidades de conexión, corregir errores producidos en esas transmisiones, etc – es simplemente imprescindible y es también un sistema muy complejo, que cuesta mucho diseñar y fabricar. Los de Qualcomm, son los mejores de la industria de la telefonía móvil desde hace mucho tiempo. Es tan duro competir contra ellos y hacer buenos módems, que la mismísima Intel deja este mercado.
Es posible que los nuevos iPhones de este año 2019 todavía utilicen módems de Intel, pero para el 2020 es ya muy improbable que eso vaya a ocurrir tras la noticia de hoy.