Desde hoy es posible utilizar Apple Pay para pagar los trayectos de transporte público de Singapur. Esta ciudad-estado asiática se une a Tokio y Shanghái en la lista de ciudades cuyo transporte público permite pagar directamente acercando el iPhone a una pequeña plataforma en los tornos de control de billetes.
Desde hace bastante tiempo ya era posible utilizar cualquier transporte público en Japón con una tarjeta prepago virtual Suica cargada en la App de Wallet.
Al no ser una tarjeta nominativa, tampoco hace falta autentificarla, simplemente acercando el iPhone se activa y permite descontar de ella el dinero correspondiente al trayecto realizado cuando se vuelve a acercar el iPhone en torno de salida. Es imposible hacerlo más rápido y fácil.
La tarjeta, se puede cargar desde cualquier otro medio de pago que tengamos en Wallet, como una tarjeta de débito o crédito, o la propia tarjeta de Apple Cash si alguien te ha enviado dinero vía App de Mensajes, por ejemplo. Esto permite poder pagar el transporte público sin necesidad de ir a ninguna tienda o máquina expendedora… basta con tener el iPhone a mano.
Apple está expandiendo el número de tarjetas de este tipo que se pueden utilizar con el iPhone; En el Reino Unido se puede utilizar en Londres, acercando el iPhone (o el Apple Watch) al torno, en Rusia se puede hacer en Moscú, Novosibirsk y San Petersburgo, en China se puede hacer en Guangzhou y Hangzhou con tarjetas UnionPay, y en Beijing y Shanghai con la tarjeta prepago de su transporte público, al igual que en Tokio con la Suica que ya hemos comentado.
Estos servicios de Apple están curiosamente más avanzados fuera de EEUU que en la tierra natal de Apple, algo que no suele ocurrir. Ahora, Apple prepara la tarjeta Ventra en Chicago, Portland y Nueva York, en donde empiezan ya mismo las pruebas en algunos tornos y líneas.
Mientras tanto en ciudades como Madrid estamos sumidos en el más absoluto caos en cuanto a métodos de pago en el transporte público; tarjetas inalámbricas que hay que cargar con billetes en lugar de dinero, billetes incompatibles con esas tarjetas que obligan a llevar una para cada medio de transporte, máquinas que a menudo no pueden cargar las tarjetas porque ya existe un billete sin utilizar o porque simplemente la máquina no funciona (algo muy habital). En lugar de crear una tarjeta única en la que uno carga dinero sin más, y lo va consumiendo en cualquier medio de transporte, aún obligan a utilizar tarjetas que simplemente son difíciles de entender y que a menudo incluso causan problemas, como los turistas que llevan al Aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid y no saben cómo pagar el estúpido suplemento extra que hay que cargar por separado en una tarjeta para poder entrar a la red de Metro desde ese punto. Mientras tanto, en el futuro™ en el que parecen encontrarse otras ciudades, simplemente acercan el iPhone y pasan. Se quedan sin dinero, y desde el propio iPhone cargan más dinero. Se acabó la explicación de cómo utilizar el sistema.