Una de las cosas que más sorprende de una Apple Store, a los que no están acostumbrados a visitar una, es el Genius Bar. Hoy nos enteramos, gracias a una entrevista en Recode a Ron Johnson, anterior responsable de Apple Retail, que desde el concepto hasta el mismo nombre, a Steve Jobs le parecía todo una idiotez.
La anecdota nos cuenta que cuando Johnson le contó a Jobs acerca de la idea, él exclamó:
¡Eso es muy idiota! ¡nunca va a funcionar!
Por lo visto Jobs pensaba que sería mejor llamarlo Geek Bar porque en su experiencia había visto que todos los geeks (fanáticos de la tecnología) que había conocido, tenían problemas para conectar con la gente. Eran buenos con los ordenadores, pero no eran buenos con las relaciones humanas. Sin embargo Johnson le convenció de que los que habían nacido hace 20 años y trabajarían en el Genius Bar, no veían la tecnología como la veían ellos, porque ya habían nacido rodeados de ordenadores. Al final accedió. Los resultados del Genius Bar inicialmente fueron bastante comedidos, pero más o menos a los tres años, Apple se vio obligada a instaurar un sistema de reservas para poder gestionar la demanda de estos especialistas en productos de Apple. El Genius Bar se convirtió en una de las marcas de identidad de Apple.
Es una anécdota muy divertida porque demuestra que alguien con tantísima visión como Steve Jobs, también tenía prejuicios y puntos de vista equivocados sobre algo que ahora nos parece muy obvio. Eso sí, Jobs pidió a los abogados de Apple registrar la marca Genius Bar al día siguiente de hablar con Johnson sobre el tema… no creía en él, pero se fiaba de lo que le decía uno de los directores de departamento. Saber delegar también es muy importante en un buen CEO.
