Dos extranjeros en EEUU de origen chino, Haotian Sun y Pengfei Xue, han sido sentenciados a 57 y 54 meses de cárcel respectivamente por haber intentado estafar más de tres millones de dólares a Apple.
La manera en la que intentaron estafar a Apple era recibiendo réplicas de iPhone desde Hong Kong en diferentes apartados postáles de oficinas de correos de Washington DC. Eran réplicas muy buenas, pero desde luego eran iPhones falsos. Estas réplicas eran entregadas como defectuosas de fábrica en las Apple Store con un número de serie e IMEI modificados para que parecieran auténticos. Los empleados de esas Apple Store procedían entonces a cambiarlo por un iPhone reacondicionado pero totalmente verdadero y funcional, que luego, Sun y Xue vendían.
Hicieron esto en varias Apple Store y durante bastante tiempo, llegando a devolver 6.000 iPhones falsos, razón por la cual saltó la liebre, como se suele decir coloquialmente, ya que despertaron demasiadas sospechas.
Es sorprendente que intenten estafar a una empresa como Apple pensando que no se darán cuenta de que tienen en las manos un iPhone falso, pero es difícil de creer que llegaran a hacer eso nada menos que 6.000 veces y que ellos pensaran que eso no levantaría sospechas, siendo además extranjeros en un país ajeno al suyo. Lamentablemente para ellos, ahora tienen un visado de residencia de casi cinco años para estar en EEUU tras este intento de estafa. El valor de los iPhones verdaderos que consiguieron es de 3,8 millones de dólares.
