El iPhone Air y el iPhone 17 están dotados de un puerto USB-C a través del cual sólo se pueden transferir datos a velocidades USB 2.0, es decir, 480 Mbit/s, que son unos 60 megabytes por segundo en condiciones óptimas.
Esto significa que si conectamos un iPhone Air a un ordenador para transferir por ejemplo algún vídeo pesado de varios gigabytes que hayamos grabado, tardará considerablemente más tiempo de lo que tardaría un iPhone 17 Pro, cuyo puerto USB-C funciona a velocidad USB 3.0 de 5 Gbit por segundo, es decir, más de 600 megabytes por segundo. Es 10 veces más rápido.
Lo mismo se puede decir del iPhone 17. Es algo bastante sorprendente teniendo en cuenta que estamos ya en el año 2025 y que USB 3.0 ya lleva muchos años disponible en infinidad de dispositivos. Es importante tenerlo cuenta si vas a necesitar transferir datos a menudo con un cable USB en tu ordenador. Si habitualmente no haces eso o haces todas tus transferencias de datos con AirDrop o copias de seguridad con iCloud, probablemente no te importe mucho esta limitación.
Para que todos lo tengamos claro, USB 2.0 debutó en abril del año 2000. Apple, en un smartphone de casi mil euros, lo continúa utilizando en septiembre del año 2025. Es importante dejar claras las fechas para que todo el mundo entienda hasta qué punto esto es un enorme WTF en el mundo de la tecnología.
