En iFixit han conseguido ya un MacBook Pro de 14 pulgadas con M3 y obviamente lo primero que han hecho con él, es abrirlo y ver cómo está hecho por dentro.
En un artículo de su blog publican el vídeo que tienes bajo estas palabras y también detallan cómo ha hecho Apple para conseguir que el nuevo color negro espacial, que en realidad es una especie de gris oscuro, tenga la capacidad de mostrar menos las marcas de huellas de la grasa de nuestra piel. Todo se reduce, básicamente, a una superficie más rugosa.
Aunque cuando miramos a la superficie de aluminio de un MacBook lo vemos perfectamente plano, con un microscopio es posible ver cierta rugosidad en ella. En todos los MacBook existe esta rugosidad, pero en el nuevo color negro espacial esa rugosidad es mucho más acusada. Esto lo que consigue es que la parte del metal que entra en contacto con nuestra piel, se reduzca, y por lo tanto, la cantidad de grasa que se queda impregnada también baja. El resultado es una reducción de las huellas que se pueden ver en ella.
En cuando a su interior, estos nuevos MacBook Pro no presentan apenas cambios en comparación con las generaciones anteriores, más allá de ese nuevo SoC M3. La diferencia entre el M3 normal y cualquiera de los M3 Pro o M3 Max, es básicamente que el sistema de disipación de calor es más complejo en estos últimos, con dos ventiladores en lugar de uno, ya que esos integrados se pueden calentar más al tener muchos más núcleos tanto en su CPU como en su GPU.
Si quieres ver todo esto en detalle, lo mejor es el vídeo de iFixit en donde podemos ver todo esto con detalle.