Apple ha anunciado en una nota de prensa que el próximo 23 de mayo la App Store recibirá la versión final de, nunca mejor dicho, Final Cut Pro y Logic Pro.
Estos dos programas son las ofertas profesionales de Apple para la edición de vídeo y edición de audio respectivamente. Si te preguntas por qué lanzan estos programas para iPad teniendo Garageband o iMovie, la respuesta es que el nivel de lo que es posible a la hora de editar tanto el vídeo como el audio en Final Cut Pro o Logic Pro se puede considerar profesional, a la altura de lo que se puede hacer en las versiones para macOS de estos programas, muy utilizados en muchos estudios alrededor del mundo.
Lo curioso de este lanzamiento tan esperado para iPad, no es la calidad de los programas, que está fuera de toda duda sobre todo teniendo en cuenta que han sido totalmente rediseñados para ser perfectamente utilizables con un dedo. Lo más sorprendente es que Apple ha decidido que el modelo de negocio de estos programas sea una suscripción y no un pago único. Final Cut Pro para iPad costará 5 eurodólares al mes. Logic Pro tendrá exactamente el mismo precio.
Sin duda, los usuarios de estos programas, si son profesionales, pensarán que se trata de un precio muy bajo, aunque los 349€ que cuesta la versión para macOS también les parecería relativamente barato comparando el precio con el que tiene, por ejemplo, Adobe Premiere, que es increíblemente caro y también utiliza un modelo de suscripción. La versión completa de DaVinci Resolve, que también tiene su versión para iPad, también es relativamente cara pero su versión gratuita funciona muy bien y permite editar vídeo hasta resoluciones 4K sin pagar un céntimo.
Logic Pro, por otro lado, es muy utilizado en infinidad de estudios de grabación, y poder llevarte los proyectos de edición donde quieras probablemente valgan esos 5 eurodólares al mes. En última instancia, serán los usuarios los que decidan si este modelo de negocio tiene sentido. Para Apple tiene mucho, porque en lugar de un pago único, tener una suscripción mensual es un buen incentivo para mantener la aplicación siempre bien actualizada y mantenida, con vida y dando beneficios como uno más de los servicios de Apple, que es el departamento que más crece en la compañía desde hace varios años.
Final Cut Pro requiere de un iPad con chip M1 o posterior. Logic Pro requiere un iPad con un procesador A12 o superior, así que es compatible con muchos más modelos de iPad en comparación con Final Cut Pro. La razón de esta diferencia es que editar vídeo, sobre todo a altas resoluciones, requiere de mucha más memoria de la que hace falta para editar audio, y sólo los modelos de iPad con procesadores M tienen elevadas cantidades de memoria RAM.