La Comisión Europea ha decidido dejar de pedir a Apple que permita métodos de pago alternativos al suyo propio en la App Store o Apple Music. Apple consigue así una importante victoria que les quita de encima bastante presión regulatoria en Europa. Sin embargo la Comisión Europea ha decidido concentrarse en una regla en particular que piensan (muy correctamente en nuestra opinión) que vulnera las posibilidades competitivas de empresas que compiten con Apple, como Spotify o Netflix. Se trata de no poder indicar al usuario que las suscripciones a un servicio se pueden hacer vía Safari, en la web, pero no directamente en la App. Apple no sólo no permite pagos alternativos en la App, tampoco permite a los desarrolladores explicar a los usuarios qué hay que hacer, o poner un enlace a su web. Los usuarios tienen que adivinarlo por sí mismos.
Según cuentan en Yahoo, los abogados de Apple han contestado que están contentos y satisfechos de que en la Unión Europea ya no les persigan por la comisión que cobran en la App Store. Llevamos años explicando que estas comisiones no son exclusivas de Apple y que Microsoft, Google, Nintendo o Sony, por ejemplo, también las cobran, y generalmente son de un 30% en lugar del 15% que Apple cobra a la inmensa mayoría de desarrolladores, los que no alcanzan el millón de dólares de facturación.
La situación, por lo tanto, parece que no va a cambiar mucho. En Países Bajos y Corea del Sur Apple permite ya los pagos alternativos con tarjeta de crédito fuera de la App Store, porque les han obligado a hacerlo así para ciertas Apps como las de citas. Son por ahora los únicos países en los que Apple da su brazo a torcer, porque no les queda más remedio, pero en este caso en la Unión Europea no parece que vayan a tener más problemas en torno a la comisión que cobran en el pago de cada App, suscripción o cualquier otro pago integrado.
Lo que están haciendo la mayoría de desarrolladores es simplemente cobrar más dinero por las suscripciones a los usuarios que se suscriben desde un iPhone. Es lo que hace Twitter con su suscripción a Twitter Blue, por ejemplo, pero Spotify o Netflix dejaron de permitir suscripciones en la App Store hace varios años y no han vuelto a mirar atrás. Simplemente dejan un botón de ayuda y si el cliente se pone en contacto con ellos, les explican que las suscripciones se tienen que hacer vía web y que las Apps sólo permiten hacer login con una cuenta que ya exista. En Spotify han llegado incluso a decir que saben que no es lo ideal en el texto que ponen en las Apps, pero en ambos casos no tienen permiso para poner un enlace a su web o explicar de alguna manera qué hay que hacer para registrarse a su servicio.
Este tipo de prácticas, realmente hacen más daño a Apple que lo que ellos piensan que ayuda. Es poner sus intereses comerciales por delante de los de los usuarios, y Apple siempre se ha caracterizado por poner a los usuarios en el centro de todo. Sin embargo, en este asunto de las comisiones, no es así. Impedir a Netflix y compañía explicar que las suscripciones se hacen en su web y poner un botón que lleve al usuario a la misma, da simplemente una imagen muy mala a Apple. Hace más daño que el beneficio económico que se supone que consiguen con este tipo de prácticas. Es una lástima que Eddy Cue o Tim Cook no lo vea así.