El año 2022 acabó extraño, como ha sido todo el año en general, con un acontecimiento que quedará marcado en la historia de Apple como la primera vez en 22 años que Apple no presenta un nuevo Mac antes de Navidad, en el último trimestre del año.
El período de Navidad es siempre el más beneficioso para todas las compañías dedicadas a fabricar dispositivos electrónicos. Es cuando se hacen muchos regalos, para otras personas o para uno mismos, y cuando las empresas pagan los bonus de fin de año.
Esto multiplica las ventas, y por supuesto Apple no es ajena a estos picos de facturación. En esta gráfica puedes saber dónde está la Navidad en cada uno de los picos de la misma, que se repiten puntualmente cada año.
Por esta razón, el ciclo de renovación de hardware de Apple suele estar fijado en el último trimestre del año para la mayoría de productos. Estos productos que se lanzan en Otoño, como Apple indica siempre como si nuestro planeta sólo tuviera un hemisferio, y se presentan en septiembre en el caso del iPhone y Apple Watch, o en octubre en el caso de los Macs y los iPads. Sin embargo el año pasado no hubo este segundo evento. Apple actualizó con un M2 el MacBook Pro de 13 pulgadas, el MacBook Air rediseñado y con un M2 y el iPad Pro, pero esto ocurrió en el mes de julio. Para finales de año, esperábamos el nuevo Mac Pro con Apple Silicon, nuevos MacBook Pro de 14 y 16 pulgadas o Mac Studio con M2 Pro o M2 Max, y quizás un iMac de 24 pulgadas con M2. Pero ninguna de estas máquinas fue anunciada… y esto, es la primera vez que ocurre en los últimos 22 años de historia de Apple.
La omisión de nuevos modelos es especialmente llamativa porque Apple prometió terminar la transición de procesadores de x86 de Intel a sus propios procesadores ARM en dos años. Ese período de tiempo se cumplió a finales del 2022, y aún tenemos un Mac mini y el Mac Pro a la venta con CPUs x86 de Intel. Por lo tanto, está claro que algo ha ocurrido para que Apple haya tropezado, y tiene que ser algo realmente grave porque si en algo es buena Apple, es en administrar su cadena de producción. Apple funciona como un reloj, lanzando cada vez más productos e incrementando modelos y versiones año tras año, durante varias décadas. Esta es la razón por la que en 22 años no había ocurrido algo así. Es fácil imaginar que los confinamientos de las fábricas de Foxconn en Zhengzhou o la falta de ciertos componentes electrónicos por la escasez de semiconductores haya tenido algo que ver. El iPhone 14 Pro se agotó varias semanas antes de Navidad, así que los usuarios que quisieran entrar en una Apple Store en Navidad y llevarse o regalar uno, no han podido hacerlo. Tampoco había esos nuevos Macs que muchos esperaban. Todo esto, sin duda, va a tener un impacto importante en los resultados de ventas para este último trimestre del año 2022, que conoceremos a finales de este mes de enero.
