Como os hemos ido contando recientemente, Twitter está sumido en una situación muy caótica que ha dado con aproximadamente el 75% de sus empleados en la calle entre despidos y dimisiones en masa tras la llegada de Elon Musk como propietario de la empresa. Ayer, en un paso más dentro de todos estos cambios, Elon Musk reinstauró la cuenta de Donald Trump tras realizar una votación que es fácilmente manipulable, por ejemplo, por los muchos bots que campan en los pastos de Twitter. En esa votación, salió un muy competido sí por encima del no, con sólo un 3,6% de diferencia. 134 millones de cuentas (que no personas) votaron.
Reinstate former President Trump
— Elon Musk (@elonmusk) November 19, 2022
Quizás como consecuencia de esto, o quizás como consecuencia de todo lo que está ocurriendo en Twitter en general, el director de marketing mundial de Apple Phil Schiller acaba de borrar su cuenta en esta red social. Tenía más de 200.000 seguidores. La cuenta fue abierta en el año 2008, así que era bastante veterano.
Por esa razón, es muy significativo que haya borrado su cuenta precisamente el día que Twitter reinstaura la cuenta de Donald Trump, que por cierto fue devuelta sin ningún seguidor. En cuestión de un día ya tiene más de 86 millones de seguidores, y eso que Trump no ha publicado aún nada en Twitter a pesar de tener la cuenta de vuelta, aunque sí ha seguido a 49 personas, entre ellas la cuenta de su mujer Ivanka.
Es muy probable que todo lo que está ocurriendo en Twitter continúe siendo noticia en las próximas semanas, porque Apple y Google también tienen mucho que decir sobre Twitter. Por ejemplo, para que Twitter continúe estando disponible en la App Store es imprescindible tener un equipo de moderación de contenidos que vigile lo que se publica, especialmente en cuentas como la de Donald Trump o el propio Elon Musk. Musk ya había prometido un equipo de moderación en el que todas las opiniones tuvieran cabida pero a los pocos días de llegar a Twitter ha reinstaurado la cuenta de Donald Trump sin utiliar ese equipo, decidiendo él mismo directamente, porque sí, porque es el jefe y así lo ordena, tras hacer una encuesta en su propia cuenta. Es muy probable que todo esto provoque dudas en la junta directiva de Apple, y por ende, en la propia compañía, que muy probablemente cuestionará la capacidad de Twitter para vigilar las fake news (bulos) y moderación de contenidos publicados.