Esta es la pregunta que miles de personas se hacen ahora mismo en todo el mundo. ¿Debo comprar el iPhone 11, o debo quizás comprar el iPhone 11 Pro? En este artículo vamos a intentar ayudarte a solucionar tu duda.
A pesar del nombre, muchos se preguntan por qué el iPhone 11 Pro es Pro. ¿Es que tiene algunas funcionalidades dirigidas a profesionales de algún tipo? – la verdad, es que no. Apple ha utilizado la palabra Pro como una manera de diferenciar el iPhone más avanzado tecnológicamente hablando, del iPhone normal, de una manera similar a como hacen con el iMac y el iMac Pro, el MacBook y el MacBook Pro, o el iPad y el iPad Pro. En realidad, sólo están unificando un poco la manera que tienen de nombrar a sus productos, a pesar de que el iPhone continúa siendo el único producto de Apple que diferencia sus generaciones con un número tras su nombre, si exceptuamos quizás el Apple Watch que ahora lleva siempre un series 4, series 5 etc detrás.
Así, la principal pregunta que debes hacerte es, ¿necesito esas mejoras tecnológicas que ofrece la versión Pro del iPhone 11, o es suficiente con la versión normal? – después de todo las diferencias son menos de las que muchos se piensan.
El iPhone 11 sigue siendo muy avanzado tecnológicamente hablando
El iPhone 11 utiliza la misma CPU y GPU que el iPhone 11 Pro. Se trata de un A13 Bionic de 7 nanometros, un chip con 8500 millones de transistores repartidos entre las diferentes tres capas que componen la CPU, la GPU y la RAM del sistema. Este proceso de fabricación de 7 nanometros, entre otras mejoras, le permite consumir menos energía que el A12 del año anterior, otorgando una hora más de autonomía al sistema en comparación con el iPhone XR, que es la generación anterior con la que hay que comparar este iPhone 11. El iPhone XR ya era el iPhone con más autonomía de todo el catálogo de Apple, y este nuevo iPhone 11 tiene aún más. La batería del iPhone 11 pasa de 2942 mAh a 3110 mAh, que es un poco más de capacidad (un 6% concretamente) que siempre ayuda.
En cuanto a la cantidad de memoria RAM, el iPhone 11 tiene 4 GB de RAM, más que el iPhone X dos años antes, y la misma RAM que un iPhone XS el año anterior.
La principal diferencia entre este iPhone 11 y el iPhone 11 Pro radica en dos componentes; Primero, la pantalla, que utiliza una tecnología LCD en lugar de OLED. Esta pantalla es como la de muchos otros modelos de iPhone en el pasado, con la diferencia de que llega de borde a borde si exceptuamos la solapa en la parte superior de la pantalla, que alberga todos los componentes TrueDepth que hacen funcionar Face ID, los Memojis, Animojis etc – ahí es donde radica la magia del reconocimiento facial. El iPhone 11, como el iPhone XR antes, tiene unos bordes de pantalla ligeramente más gruesos que el iPhone X, XS y 11 Pro. Es uno de los precios que hay que pagar por utilizar tecnología LCD en la pantalla, en lugar de OLED. A pesar de todo, se ve increíblemente bien, con una resolución de 1792×828 pixeles que la da una densidad de 326 puntos por pulgada. Tendrás problemas para ver un pixel a simple vista. El color, contraste etc también son muy buenos, como cabría esperar de Apple, y el amplio ángulo de visión que ofrecen estos paneles IPS te garantizan que no verás colores o brillos extraños al mirar la pantalla desde diferentes ángulos.
Ahora, esa pantalla no es OLED, como la del iPhone 11 Pro, que sin duda, es mejor, como explicaremos más adelante. Es muy buena, pero no es la mejor. Su tamaño es de 6,1 pulgadas, a medio camino entre el iPhone 11 Pro y el iPhone 11 Pro Max.
Por último, el sistema de cámaras traseras es la otra gran diferencia; El iPhone 11 tiene dos cámaras traseras, y al contrario de lo que Apple ha hecho en generaciones anteriores de iPhone, en lugar de incluir una cámara con lentes gran angular y teleobjetivo, en este caso ha incluido gran angular y ultra gran angular. Puedes hacer fotos, por decirlo de alguna manera, con la cámara normal (el gran angular) o puedes hacer fotos en las que caben muchas más personas, o más paisaje, con el ultra-gran angular. Ambas graban vídeo 4K a 60 fotogramas por segundo y ambas tienen 12 megapixeles de resolución, ambas pueden hacer mejores fotos de noche, y ambas se pueden utilizar al mismo tiempo para hacer fotos retrato o para hacer dos fotos al mismo tiempo con Deep Fusion y ampliar partes de la imagen tras hacer la foto, sin perder calidad. Todas estas funcionalidades se equiparan a las que un iPhone 11 Pro puede hacer con esas dos mismas lentes de su juego de tres. Las fotos del iPhone 11 no van a ser peores que las del iPhone 11 Pro en ningún aspecto, dejando de lado que le falta una tercera cámara tipo teleobjetivo.
El iPhone 11 Pro es todo lo mejor que Apple puede ofrecer
El iPhone 11 Pro tiene como objetivo algo muy sencillo: Incluir todas las mejores tecnologías que Apple pueda fabricar, sin tener muy en cuenta su coste. Esta es la razón por la que tiene la mejor pantalla que Apple puede ofrecer, de tipo OLED, en la que la luz viene de cada sub-pixel individualmente y que gracias a la flexibilidad del sustrato sobre el que se fabrica, permite tener unos bordes más delgados a este modelo de iPhone, en comparación con los del iPhone 11. Además, tiene por supuesto las grandes ventajas de la tecnología OLED; El negro es realmente negro, porque no hay un panel retroiluminado debajo de los pixeles negros, y esto les da un contraste que está simplemente en otra liga comparado con el de cualquier pantalla LCD. Es simplemente incomparable. Además tiene una resolución más alta de 2436×1125 pixeles en el iPhone 11 Pro y de unos increíbles 2688×1242 pixeles en el iPhone 11 Pro Max, ambos con una densidad de 458 puntos por pulgada. Sin un microscopio, es simplemente imposible apreciar un pixel a simple vistas.
El color también es más vibrante e intenso que el de cualquier pantalla LCD. Aunque la pantalla del iPhone 11 se ve muy bien, la pantalla del iPhone 11 Pro es simplemente sobrecogedora. La mejor manera de entenderlo es poniendo una al lado de otra, si tienes la oportunidad. La pantalla LCD del iPhone 11 será más que buena para la inmensa mayoría de usuarios, pero si quieres la mejor pantalla que un smartphone puede tener hoy en día, ninguna supera a la de un iPhone 11 Pro. Cuesta imaginar que sea posible fabricar pantallas mejores que estas.
La CPU A13 continúa siendo la misma que en el caso del iPhone 11, pero viene con una mejora importante; En lugar de 4 GB de RAM, trae 6 GB de RAM, un 50% más, que sin duda ayudará mucho cuando tienes varias Apps funcionando en segundo plano, sobre todo si hace tiempo que no has reiniciado el sistema.
Por último tenemos esas tres cámaras; Además de una de tipo gran angular, y otra de tipo ultra-gran angular, la novedad de este año, continuamos teniendo la cámara teleobjetivo que sin duda permite hacer fotos también de sujetos que tengamos más lejos o de los que no queramos que tengan nada cerca.
Esto nos permite conseguir tres tipos de encuadres muy diferentes y un tipo de fotos Deep Fusion con varios niveles de zoom almacenados en la misma imagen.
Conclusión, ¿cuál es mejor para mi?
Esta es una pregunta que sólo te puedes contestar tú mismo. Debes preguntarte hasta qué punto es importante la cámara para ti, y tener esa tercera lente de tipo teleobjetivo. ¿La vas a utilizar mucho? – depende mucho del tipo de fotografía que te guste.
¿Es importante tener más memoria RAM? – desde luego que sí. En nuestra opinión, sólo este parámetro le da uno o dos años más de longevidad a este iPhone 11 Pro por encima del iPhone 11. Con el paso del tiempo, las Apps e iOS en sí mismo, van a necesitar más RAM. Ha venido ocurriendo así desde los albores de la informática y todos recordamos la famosa frase de Bill Gates argumentando que nunca nadie necesitaría más de 640 Kbytes de RAM. Pero la realidad es que con la RAM, cuanto más se tenga, mejor. Apple siempre ha sido muy conservadora con la RAM porque, entre otras razones como el consumo energético, la RAM siempre ha sido uno de los componentes que más encarecen un producto, a pesar de lo cual, la percepción del público en general no cambia mucho si un smartphone tiene más o menos RAM. La verdad es que es realmente importante, de las características más importantes que uno pueda necesitar en cualquier situación. ¿Quieres que la web que estabas viendo en Safari no vuelva a cargar cuando has dejado de leer un artículo para hacer una foto? – quieres, de hecho, volver a Safari 5 horas más tarde y que la página siga cargada sin más, incluso si no tienes conexión a Internet? – para esto, te hará falta más RAM… y el iPhone 11 Pro tiene un 50% más que el iPhone 11. Es una gran ventaja.
Por último, la pantalla… si una buena pantalla es muy importante para ti, ambos modelos de iPhone 11 te van a satisfacer, pero la pantalla OLED de un iPhone 11 Pro es realmente inmejorable. Si las pantallas son primordiales para ti, no debes olvidar la enorme ventaja que supone hoy en día utilizar una pantalla OLED sobre una LCD. Después de solucionar diferentes handicaps técnicos de las pantallas OLED en el pasado, hoy en día su único problema es que son mucho más caras de fabricar. De ahí el precio más alto del iPhone 11 Pro, y por esa razón Apple continúa sacando al mercado iPhones con pantallas LCD. Es sólo cuestión de tiempo que todos los nuevos modelos de iPhone que Apple lance al mercado cada año tengan una pantalla OLED, pero hasta que los precios de su fabricación bajen, esta será la estrategia de Apple. Si quieres la mejor pantalla, no hay elección: El iPhone 11 Pro es tu smartphone. Además tienes la opción de tener una enorme pantalla de 6,5 pulgadas, si te gustan los smartphones grandes, en ese caso la elección es fácil. Por el contrario, si te gustan los smartphones más pequeños y manejables, el iPhone 11 Pro de 5,8 pulgadas es más pequeño que el iPhone 11 con su pantalla de 6,1 pulgadas, y Apple hoy en día no fabrica, al menos por ahora, ningún smartphone más pequeño que ese.
Si una pantalla buena, muy buena diríamos, con una resolución un poco más baja que ayuda también a conservar energía y conseguir mayor autonomía es aceptable para ti, el iPhone 11 es el modelo que debes elegir. No es la mejor, pero sí es suficientemente buena. La elección es tuya.