A finales del año pasado Google sorprendió a todos con la presentación de una tableta propia de 12,3 pulgadas que, a diferencia del iPad, no utilizaba el sistema operativo de sus smartphones, Android, sino ChromeOS. Se trataba de la Pixel Slate. Esta tableta, diseñada por el mismo equipo que se encarga de diseñar y fabricar los Pixelbook, era la versión en tableta de esos portátiles que Google vende y que sí han tenido cierto éxito. Sin embargo, las tabletas parece que no han cuajado y por eso poco más de medio año después de su presentación, han anunciado que no van a seguir diseñando nuevas versiones.
Lo más probable es que no haya resultado ser tan popular como ellos esperaban y prefieren cortar por lo sano antes de que el coste se eleve mas. Desaparece así del mercado una de las tabletas rivales del iPad y de la Surface Pro de Microsoft, hasta ahora las dos familias de dispositivos más populares en ese mercado. En Google ni siquiera han intentado cambiar el sistema operativo a Android – simplemente han acabado con el proyecto.
Eso sí, Rick Osterloh, el responsable de hardware en Google, ha dejado claro que continuarán dando soporte a la Pixel Slate así que los usuarios que la han comprado pueden quedar tranquilos. Además de eso, continuarán apoyando a los socios que tienen fabricando tabletas Android. Google deja de hacer tabletas con ChromeOS pero continuará colaborando con todos los demás fabricantes de tabletas Android como hasta ahora.
Hey, it's true…Google's HARDWARE team will be solely focused on building laptops moving forward, but make no mistake, Android & Chrome OS teams are 100% committed for the long-run on working with our partners on tablets for all segments of the market (consumer, enterprise, edu)
— Rick Osterloh (@rosterloh) June 20, 2019
También es probable que en esta decisión haya tenido que ver mucho el hecho de que el equipo que diseña estas tabletas sea el mismo que el Pixelbook, el portátil que sí que ha cosechado cierto éxito sobre todo entre desarrolladores. No tenía su propio equipo separado, como sí lo tienen los smartphones Pixel, por ejemplo.
