Probamos el iPhone 8: ¿Merece la pena actualizar tu iPhone al nuevo modelo?

Mientras muchos esperan al iPhone X, hemos tenido la oportunidad de probar un iPhone 8 y 8 Plus, y en este artículo os vamos a contar nuestras impresiones generales, sobre todo teniendo en cuenta a todos aquellos que están pensando en actualizar su iPhone de tres años o más, es decir, un iPhone 6, 5S o anterior, a este nuevo modelo.

Probando el iPhone 8 Plus

La primera impresión que causa tanto el iPhone 8 como el iPhone 8 Plus es su peso. Es considerablemente más pesado que cualquiera de las tres generaciones anteriores de este diseño, el iPhone 6, 6S y 7. Es probable que ese incremento de peso se deba a esa carcasa trasera de cristal, en lugar de aluminio, mucho menos denso y por lo tanto más liviano. Pero esto no es algo malo, sino sorprendentemente reconfortante. Parece mentira, pero un iPhone más pesado también se sostiene mucho mejor en la mano, y gracias a ese cristal, resbala mucho menos que antes. Los anteriores modelos de iPhone con este diseño casi requerían poner una una funda, no ya para protegerlos de golpes y arañazos, sino simplemente para que otro material menos resbaladizo nos permitiera sostenerlo en la mano sin miedo.

iPhone 8 Plus blanco por detrás, con su carcasa de cristal

Esa funda, al menos para que no resbale, ya no es necesaria. El iPhone 8 y sobre todo el iPhone 8 Plus, resbalan muchísimo menos. Es mucho más fácil sostenerlo en la mano sin miedo, y utilizarlos con una sola mano sin miedo a que se escape de nuestros dedos y caiga al suelo. Sólo por eso, casi nos da la sensación de que el cristal, a pesar de su fragilidad comparado con el aluminio o incluso el plástico, es el mejor material premium para un Smartphone de alta gama. Recuerda a la manera de sostener un iPhone 4 y 4S, pero más cómodamente al no tener bordes tan afilados como esos dos modelos anteriores de iPhone.

Otro detalle que llama la atención es que la lente de la cámara exterior sobresale por encima del pequeño anillo o elevamiento que se supone que la protege. Ahora, no es más que un adorno, un borde cosmético que no protege la lente en si. El cristal, una aleación de zafiro propia de Apple, parece ser muy resistente pero esperamos ver los bordes de esta lente mucho más arañados que antes si no utilizas una funda y dejas el iPhone sobre una superficie con la pantalla mirando hacia arriba muy a menudo. Arañar los bordes de la lente no debería causar problema ninguno a la hora de hacer fotos porque ese borde está lejos del campo de visión de esa lente, más al centro de la misma, pero si tuviéramos que buscar una excusa para no disfrutar de ese maravilloso acabado en cristal, buscaríamos esa… proteger la lente de la cámara, que sobresale por detrás.

Lente de la cámara doble trasera del iPhone 8

Llevamos años, desde el lanzamiento del iPhone 6, aguantando esa lente que sobresale un poco por detrás. Sigue sin gustarnos. Casi preferiríamos tener un iPhone más grueso, hasta la altura de esa lente, y aprovechar ese espacio para utilizar una batería también más gruesa, de más capacidad, pero está claro que en Apple van a utilizar siempre la batería que de más o menos la misma autonomía que el iPhone del año anterior. Si el nuevo iPhone consume menos gracias a las mejoras de consumo de su procesador central y otros chips como los conforman el baseband, Apple hace la batería más pequeña. Esto es exactamente lo que ha pasado con el iPhone 8… la duración de la carga de su batería es exactamente la misma que la del iPhone 7, a pesar de ser mucho más rápido. Es todo un logro, pero a veces nos gustaría que el diseño no tuviera preferencia por encima del rendimiento, en cada generación del iPhone. Obviamente, en Apple opinan diferente.

En cuanto al rendimiento del sistema, es simplemente espectacular. Abrir Apps es casi instantáneo. Se nota que no sólo el rendimiento de la CPU, sino también el acceso a los archivos almacenados es mucho más rápido que antes, sobre todo comparado con el iPhone 6S, y simplemente incomparable con el iPhone 6. Respecto al iPhone 7, se siente ligeramente más rápido, pero no mucho más. Da la sensación de que iOS 11 no va a funcionar más rápido por tener una CPU mucho más rápida que antes, ya va al máximo de velocidad, limitado sólo por la duración de las animaciones que Apple ha programado en cada interacción con el sistema. Serán las Apps que utilicen el procesador a su máximo rendimiento las que sacarán el máximo partido a los seis núcleos que pueden funcionar simultáneamente por primera vez, gracias a ese A11 Bionic.

iPhone 8 y 8 Plus con iPhoneros cargado

En cuanto a la cámara, los modos retrato son realmente espectaculares, y el modo «Iluminación de retratos» que permite oscurecer además de difuminar el fondo al mismo tiempo es realmente espectacular, aunque haciendo zoom en la foto todavía se pueden apreciar inconsistencias en esa separación del sujeto fotografiado y el fondo. No es perfecto, pero sí es muy bueno, más que suficiente para la inmensa mayoría de usuarios. Eso sí, los que digan que eso sustituye a una buena cámara de fotos con una lente muy rápida (número f muy bajo) y un enorme sensor Full Frame, simplemente no saben de qué hablan. Es muy bueno como modo para hacer fotos con un smartphone. Hará que millones de personas hagan mejores retratos, sí… sin duda. Pero no es para nada sustituto de una buena cámara, simplemente porque el tamaño del sensor impide que reciba tanta luz. Cada vez que aparece una nueva generación de iPhone aparecen artículos hablando de si los smartphones están matando el mercado de las cámaras digitales, y en parte sí lo están haciendo, con ese mercado de las cámaras point and shoot (pulsar y hacer la foto sin complicaciones) pero las cámaras de fotos dedicadas simplemente no se pueden comparar. Con un iPhone 8 Plus conseguirás mejores fotos, sí… de eso no cabe duda, pero si quieres la mejor calidad, por ahora una cámara dedicada con su gran sensor y enorme lente comparada con la del iPhone, que tanga una conexión Wi-Fi para pasar las fotos al iPhone directamente, continúa siendo mejor opción en nuestra opinión. Si eso no te llama la atención, tendrás más que suficiente con la buenísima cámara que tiene el iPhone 8, sin duda de las mejores sino la mejor de todo el mercado de smartphones ahora mismo. Por cierto, es importante reseñar que sólo el iPhone X tiene estabilización óptica en ambas lentes traseras, mientras que el iPhone 8 Plus tiene sólo en la lente principal, la del angular más abierto.

¿Merece la pena actualizar mi iPhone?

Si tienes un iPhone 6 o inferior, sí, sin duda. Si no quieres esperar al iPhone X todo pantalla, que será difícil de conseguir durante los primeros meses, es una buena actualización. Por ahora consideramos que tres años es un buen tiempo utilización media para un iPhone, aunque siempre depende del uso que le des. Si sólo quieres utilizar WhatsApp, un iPhone 4S puede continuar siendo muy válido. Por eso, piensa en lo que más valoras en tu iPhone, y ahí tendrás la respuesta. Recuerda que un iPhone suele conservar mucho mejor parte de su valor en comparación con smartphones Android, y por lo tanto, sobre todo si lo tienes bien cuidado, aún podrás venderlo por un precio interesante, que te ayude a amortizar la compra del iPhone 8 u 8 Plus.

Si tienes un iPhone 6S, la situación se complica bastante más. Es más difícil justificar un cambio de terminal, porque el 6S, continúa siendo rápido y también tiene una cámara excelente. Si no eres un iPhonero hard code y quieres tener siempre lo último, no te lo plantees. Probablemente, sea mejor esperar un año más y comprar el nuevo iPhone del año 2018, cuando probablemente todos los modelos sean todo pantalla como el iPhone X y además no sea tan difícil conseguir uno.

Si tienes un iPhone 7, no vemos justificada una actualización. Sólo si te sobran 800 eurodólares y cambias de iPhone cada año se puede comprender. En el lado bueno de las cosas tenemos el precio de re-venta de un iPhone 7, muy alto, que te ayuda amortizar gran parte del precio de un iPhone 8 y hacer esa actualización más justificable.

En cualquier caso, repetimos, lo importante es evaluar para qué utilizas el iPhone. Por ejemplo si tener las mejores fotos posibles es una prioridad máxima para ti, la cámara del iPhone 8 es excelente, recibe más luz y te permitirá conseguir mejores tomas prácticamente en cualquier situación. Si eres periodista y utilizas la cámara de tu iPhone en muchas situaciones, no hay discusión posible. Si no te encuentras en una situación así, sólo recomendamos la actualización si tienes un iPhone 6 con sus tres años de uso. Véndelo o haz que un familiar o amigo lo herede, pero no se lo des a Apple porque ellos te van a dar muy poco dinero por él. Es mejor que alguien lo utilice, o que lo vendas por otros medios a un particular.

Newsletter

DEJA UNA RESPUESTA

Teclea aquí tu comentario
Introduce aquí tu nombre