En una entrevista que Tony Fadell ha concedido a The Verge, nos aclara varias cosas que parece ser fueron malentendidas tras ver lo que parecían prototipos de iPhone funcionando con versiones muy tempranas del sistema operativo del iPhone.
Para empezar nos cuenta que en realidad no eran equipos en Apple que competían con diferentes ideas de sistemas operativos, sino que eran bastantes más personas que casi de manera individual creaban diferentes versiones de lo que pensaban que debía ser el iPhone. Según nos cuenta Fadell, había como 16 o 17 versiones de ese sistema operativo inicial. Lo que vimos en el vídeo de ayer, que os reproducimos aquí de nuevo, eran sólo dos de esas versiones.
Además, nos cuenta que esos sistemas operativos funcionaron siempre en un Mac, y no en una especie de iPhone original con el botón Home negro como el que aparece en los vídeos. Ellos, nunca probaron sus sistemas en un iPhone así, y de hecho, en ningún prototipo de iPhone… siempre mostraron el sistema a Jobs en un Mac. La razón por la que en ese vídeo aparecen esos dos supuestos prototipos uno al lado del otro es desconocida para él… sólo nos cuenta que, probablemente, alguien decidió portar eso a un prototipo, recompilando el sistema, pero que no sabe si es alguien de fuera o si es alguien en Apple. Hasta ayer, él no conocía que esos sistemas habían sido portados a máquinas así. Fadell aparece en esta foto al lado de Phil Schiller, el segundo por la izquierda.
Por último, Fadell explica que en realidad el sistema de la rueda Clickwheel de iPod era uno de los intentos por crear una especie de iPod Video, y que más adelante crearon un verdadero iPod con teléfono con la rueda física, pero era muy difícil marcar números. Este dispositivo tenía una pantalla más pequeña. Finalmente decidieron volver atrás y con una pantalla más grande utilizar una interfaz de botones como la que vemos en el prototipo de la derecha en el vídeo. Por lo tanto, más que dos sistemas competidores, lo que vemos ahí son los sistemas con los que Apple experimentaba, y con varios equipos y personas involucrados aunque no competidores entre ellos. Simplemente, probaban lo que funcionaba, y lo que no funcionaba, en una buena demostración de esa frase de Apple: Hay 1000 nos para cada sí.
Otra de las curiosidades que Fadell cuenta es que en cierto punto, había una versión de sistema operativo para el futuro iPhone que funcionaba con Linux. Otro equipo, el de Scott Forstall, trabajaba con una versión del sistema basada en OS X, con el mismo kernel (núcleo) que el sistema operativo de los Macs, y que se llamaba Purple OS, como ya sabemos, porque el proyecto de desarrollo del iPhone se llamaba Purple. Éste fue el que finalmente fue elegido, y se convirtió en iPhoneOS. Con el paso de los pasos, pasó a llamarse iOS, y hoy en día vamos ya por la décima versión mayor de ese sistema operativo. El año 2017 verá la salida de iOS 11, tras diez años de historia del iPhone.