Hasta ahora nunca habíamos hablado de Cardboard, uno de esos proyectos de Google que parece que van de broma pero que con el paso del tiempo se convierten en algo más serio. Cardboard soluciona el principal problema que tiene la Realidad Virtual hoy en día; Su precio. Con un simple cartón, se pueden conseguir unas gafas en las que meter un iPhone y gracias a su pantalla y una App específica, utilizar el giroscopio de la máquina para meterte en mundos virtuales por un precio muy bajo… después de todo, es sólo cartón y una App gratuita
El diseño recortable de ese cartón que te permite conseguir las gafas, está disponible gratuitamente en la web de Cardboard. Si eres un poco manitas, te lo puedes construir tú mismo.
Si no eres muy hábil con las tijeras o no tienes cartón lo suficientemente resistente a mano, también puedes comprarlo por muy poco dinero en esa misma web… el de Google, el oficial, o muchos otros de terceros con diseños ligeramente diferentes.
La nueva versión de Google Cardboard que ya está disponible es oficialmente compatible con el iPhone y por eso hay también App oficial en la App Store. La versión anterior también podía utilizar un iPhone con algunos pequeños ajustes, pero la actual es simplemente colocar el smartphone en su sitio, incluso si es el iPhone 6 con pantalla más grande, y empezar a disfrutar tras ponerte las gafas. La App, mostrará una imagen para cada ojo, y todo se moverá utilizando los sensores de movimiento apropiadamente.
La App es una colección de demostraciones que te permite observar objetos en 3D o darte una vuelta por conocidas ciudades de todo el mundo. También tiene una versión de un caleidoscopio adaptada a este sistema, que es francamente espectacular.
Obviamente esta es una solución de bajo coste. Para lo que cuesta, hace realmente mucho… sorprenderá a más de un amigo, sin duda alguna. Pero al ser cartón y estar hecho a mano, está obviamente bastante limitado; Empezamos con el hecho de que la luz se cuela bastante por diferentes lugares de las gafas, creando reflejos y distracciones que empeoran la calidad de la experiencia. Si puedes, es mejor utilizar este invento en una habitación oscura. A cambio, tenemos la flexibilidad que supone bajarte un esquema de Internet y crearte tus propias gafas, con las distancias adecuadas a la pantalla y una App creada específicamente para ellas. Es primitivo, sí, pero no por eso deja de ser realidad virtual. Merece la pena probarlo. En este vídeo podemos ver cómo funciona con un iPhone 6 Plus.
Vídeo vía: The Verge.
[…] en el interior se encargan de indicar al sistema cómo mover las imágenes. El resultado son unas gafas de realidad virtual de bajo coste. Sin duda no tienen la calidad que ofrecen unas gafas de realidad virtual dedicadas pero sí que […]