El BMW i3, bajo estas líneas, podría ser la base sobre la que Apple diseñaría su propio coche eléctrico, que se supone que está a unos cinco años vista ahora mismo.
La idea viene de una publicación alemana llamada Manager Magazin (traducción automática de Google).
Ambas compañías habían negociado ya durante el 2014, pero al no llegar a un acuerdo dejaron las conversaciones para este año, en donde parece que podrían haber acordado utilizar la plataforma del i3 de BMW como una base sobre la que construir el coche que Apple quiere. Es muy habitual para muchas marcas utilizar la base de un modelo para desarrollar uno de nuevo, a veces con un origen propio y otras, de otras marcas. Es por esto que es habitual encontrar grupos empresariales que comparten piezas, como Seat y Volkswagen, o Renault y Nissan entre muchas otras.
El i3 tiene un rango eléctrico de 150 kilómetros, muy lejos de los 500 km que tiene el modelo más caro de Tesla, ahora mismo el ejemplo a seguir por la industria de coches eléctricos en absolutamente todos los sentidos. Están tan seguros de su buen hacer, que el CEO de Tesla, Elon Musk, está deseando que Apple entre a este mercado para revolucionarlo. Considera que eso también les ayudará a ellos a abrir más esta industria, ahora mismo casi inalcanzable para la mayoría de conductores por los elevados precios de los coches en cuanto quieres autonomía de verdad que supere al menos los 250 km. También por esa razón liberan su propia tecnología para que cualquiera la pueda utilizar. En Tesla tienen a un CEO realmente inteligente. Ojalá que en BMW y Apple también lo sepan y la oferta de este coche de Apple sea realmente interesante en el futuro, si es que algún día se hace realidad.
