Después del regreso forzado de Fortnite a la App Store, ha pasado lo que Apple probablemente no quería que pasara: Se ha convertido en la App gratuita más descargada de toda la tienda.
La noticia no sorprende si tenemos en cuenta que los usuarios de iPhone llevaban cinco años sin poder descargarla. Había ganas. Las novedades que ahora han añadido al juego, como poder charlar con Darth Vader gracias a una IA de generación de diálogos, que menciona al usuario por su nombre, también nos imaginamos que habrá ayudado a hacer la versión actual especialmente popular.
La versión de Fortnite publicada en EEUU desde la filial sueca de Epic Games, no utiliza pagos integrados sino pagos externos vía web, en Safari, a donde se va desde un enlace en la App. Es la peor situación posible desde el punto de vista de Apple; La empresa que rompió las normas para desarrolladores deliberadamente, normas que había aceptado previamente, y que luego llevó a Apple a juicio durante años tras ser expulsados de su tienda online, tiene ahora justo lo que quería… su juego más famoso con pagos externos y sin pagar ninguna comisión.
Epic Games ha pagado literalmente decenas de millones por todos estos juicios durante años, y ha dejado de ganar mucho más, probablemente más de mil millones de dólares, mientras Fortnite no ha estado disponible en la App Store. El resultado ahora es la pérdida de esas comisiones en pagos integrados en muchas otras Apps de muchas otras compañías. Apple ha apelado esta decisión judicial pero es muy poco probable que consiga nada, especialmente tras haberse resistido tanto a cumplir sus mandatos hasta ahora o intentar continuar cobrando comisiones de hasta el 27% a Apps con medios de pago externos, opción que prácticamente ningún desarrollador ha elegido porque las molestias de implementar todo eso y ver un mensaje en pantalla asustando a los usuarios sobre pagos menos seguros, han hecho que no merezca la pena, que era exactamente lo que Apple quería.
