Cómo es el cargador de Apple por dentro y por qué cuesta lo que cuesta

Hace unos meses publicamos un artículo sobre el peligro que implica utilizar cargadores de marcas desconocidas, que por lo general cuestan del orden de 10 veces menos que uno de Apple y quizás cinco o seis veces menos que un cargador de otra marca certificada por el fabricante del iPhone, iPod touch o iPad. Hoy publicamos otro que muestra lo que tiene el cargador de Apple por dentro, más que nada para que se pueda comprender por qué la salida de voltaje e intensidad que ofrece es de tan buena calidad, y qué medidas de seguridad se han seguido en el diseño. Está claro que un cargador de este tipo no cuesta tampoco 30 dólares – es probable que Apple pudiera venderlo más barato y todavía sacar bastante beneficio pero todos sabemos que esta marca no mira mucho por el precio de sus productos, sobre todo cuando se habla de accesorios. Calcula todo lo que cuesta el buen diseño, buenos materiales, buen empaquetamiento… y luego le añade un generoso margen de beneficio, superior al de muchas marcas. Al menos, nos podemos quedar tranquilos con algo: Es un producto de excelente calidad y un diseño espectacular… también por dentro, como bien le gustaba a Steve Jobs gracias a las enseñanzas de su padre adoptivo. Casi nadie se para a pensar en algo así, pero hay muchas horas de diseño y cuidado por hacer las cosas bien en algo que parece muy simple pero que, como vamos a ver ahora, no lo es tanto.

Lo primero que hay que dejar claro es que el cargador del iPhone no es el mismo en todo el mundo. Por razones obvias de forma del enchufe, voltaje y amperaje, el cargador cambia según el país en el que se vende. El de la foto de arriba es el norteamericano o japonés, habitual en países en donde se utiliza un voltaje domésito de 100 a 120v. Es realmente el más pequeño, y como vemos, está lleno de componentes, lo mires por el lado que lo mires.

Se trata de dos circuitos que están colocados en forma de sandwich. Sin entender mucho sobre lo que hace cada uno de estos componentes, podemos ver cómo se aislan debidamente, con todo tipo de protecciones de goma, cintas etc.

El cargador de Apple, aunque la mayoría de la gente lo llama transformador o cargador sin más, es en realidad una fuente conmutada. No vamos a entrar en muchos detalles técnicos, pero básicamente es el tipo de fuente de alimentación que utilizan la inmensa mayoría de dispositivos electrónicos modernos hoy en día. Ésta es una de las dos placas que utiliza el cargador de Apple, por ambos lados.

… y ésta es la otra placa, también llena de componentes. Es aquí en donde se comprueba si el cargador está soportado o no… si vemos el típico mensaje en el iPhone que dice que este cargador no está soportado es porque las resistencias que hay en este lugar no son las adecuadas para los márgenes de ruido e intensidad que necesita el iPhone (y que mide cuando se conecta el cable). No es un mensaje que aparezca por un chip de seguridad ni cosas así (eso sólo ocurre con el cable Lightning, pero eso es otra historia diferente del mensaje que aparece si la fuente de alimentación no es de buena calidad).

Un cargador así de pequeño, a pesar de conectarse a una corriente alterna de entre 100 y 120 voltios, puede llegar a tener en su interior corrientes continuas de hasta 340 voltios… ese es el tipo de corriente que puede hacerle daño a una persona, así que, mejor aislarla bien del resto de componentes. Por lo general, el estándar en la industria es dejar una separación de al menos 4 milímetros entre pistas que lleven este tipo de corriente y las que llevan la corriente de 5V y 1A que le llega al iPhone. Los cargadores de marcas desconocidas que te envían desde China por 3€ con gastos de envío incluidos, ignoran esta medida de seguridad totalmente. Puede parecer que no, pero es un detalle muy importante, hasta el punto que Apple ha lanzado una campaña en la que te cambia un cargador, el que sea, por uno original, a cambio de sólo 10€ o lo que corresponda en tu país.

Así es como el cargador de Apple aisla los componentes en el interior; Además de tener las debidas protecciones con cinta aislante y gomas, también han colocado los componentes del cargador que tienen altos voltajes y los que alimentan el puerto USB lo más alejado posible, dejando un espacio intermedio de mucho más de 4 milímetros.

El componente más caro de toda la máquina es el transformador en si, que es sólo esta pieza.

Vamos a ver qué tiene dentro algo así… es precisamente aquí en donde los cargadores muy baratos ahorran costes. El tipo de triple aislamiento que tiene aquí el cable, a menudo falta en un cargador súper barato. ¿Por qué? Porque funciona sin él también, aunque no es lo más seguro que puedes hacer. Tampoco le ponen la cinta aislante exterior que hemos visto antes y que cubre todo el conjunto.

Si desenrollamos todo este cable y aislante, queda así;

El cargador de Apple también se esfuerza especialmente en no producir interferencias con componentes muy sensibles como la pantalla táctil del iPhone. Hay muchos componentes en este cargador que se podrían obviar… y seguiría funcionando. Pero la calidad de la corriente que saldría y llega al iPhone no sería tan buena, perfectamente filtrada y sin apenas ruido. Incorpora componentes incluso para poder escuchar música en el iPhone mientras carga, y que no suene ruido de fondo, algo habitual con fuentes de alimentación de baja calidad. Te recomendamos leer este artículo (en inglés), de donde hemos sacado todas estas fotos y en donde dan explicaciones con todo tipo de detalles que demuestran hasta qué punto una marca como Apple se obsesiona con la calidad de sus productos.

Ahora, dicho todo esto volvemos a repetir que un precio de 30 dólares por un transformador que quizás cueste 10 dólares producirlo. Pero como ya sabemos todos, y sobre todo ahora que acaba de salir el iPhone 5C más barato, en Apple no hacen malos aparatos, y a cambio piden márgenes de beneficio muy altos. Pueden cobrarlos, porque mucha gente busca calidad por encima de todo y si se lo puede permitir, lo paga. Con el diseño de este cargador lo hemos visto… sabes que te llevas algo de calidad y 30 dólares para una máquina que utilizarás todos los días durante dos o tres años mínimo (quizás más, cuando compres otro iPhone) es sin duda un precio que merece la pena. Si no te parece bien, siempre tienes muchas otras marcas certificadas que Apple vende en sus tiendas, y que también puedes encontrar en muchas otras. Son productos de calidad, quizás la misma o parecida a la del cargador de Apple, pero cuestan 15 o 20 dólares. Cualquiera de estos cargadores es mucho mejor que los de 3€ en las tiendas Chinas de eBay.