Ayer, Apple presentó las Vision Pro, sus nuevas gafas de realidad mixta, y la verdad es que aunque todos esperábamos ver este producto por todos los rumores que hubo antes, no nos esperábamos que fuera tan espectacular en cuanto a su utilización. visualOS, su sistema operativo, parece mucho más pulido de lo que nos imaginábamos. Es difícil pensar que sea sólo la primera versión, y que esta sea la base sobre la que mejorar, iterar como hace siempre Apple, e ir sacando nuevos modelos y versiones en el futuro, con actualizaciones de visualOS que mejoren lo que ya hemos visto. Este ha sido siempre el camino de Apple.
Teniendo esto en cuenta, es muy importante comprender por qué las Vision Pro cuestan 3499 dólares.
Así funciona siempre Apple
Es muy difícil hacer lo que hace Apple. Nos hemos acostumbrado todos a ver cómo en Apple lanzan un producto estrella detrás de otro y se comen mercados enteros, o cambian industrias como si fuera fácil. Tan fácil, de hecho, que parece que no les cuesta esfuerzo. Pero no es así, y no ha sido siempre así. Parece que lo hacen todo fácilmente, pero para nada es fácil. Hoy en día Windows y los PCs clónicos dominan el mercado de la informática, y si bien el iPhone se ha hecho con una parte muy importante del mercado que Microsoft no consiguió al perder su posición contra Android, no se podría decir que Apple gana todas las batallas. Quizás con el iPad dominan ampliamente el mercado de las tablets, pero ni se acerca al tamaño de su negocio con el iPhone. Con el Apple Watch, empezaron más o menos lentos pero con el paso de los años se han convertido también en el mayor vendedor de relojes inteligentes del mundo. En todos estos casos, Apple siempre ha seguido el mismo patrón; investigar, diseñar, probar muchas veces, decir que no muchas más, y cuando tienen algo que piensan que mejora lo que había, lo presentan al precio que les cueste fabricarlo, y añaden un 30 o 35% de margen sobre el mismo. Así es como hemos llegado a las Vision Pro en este año 2023, después de muchos años de inversiones, investigaciones y desarrollos tanto de hardware como de software. Por esto, las Vision Pro son tan caras.
En todo este proceso, no hay en el mundo una empresa mejor que Apple. Meta lleva años enfrascada en el desarrollo de su «Metaverso», y apuestan por él hasta el punto de cambiar el nombre de su empresa a Meta. Pero después de ver lo que presentó ayer Apple, ver lo que Meta ha mostrado hasta ahora y vende con sus gafas, les deja en una mala posición, vistos con una luz muy poco favorable. Simplemente, no hay comparación posible. Una imagen del Metaverso con Zuckerberg al frente deja clara la situacón.
En Meta se apresuraron a presentar sus Quest 3, con lanzamiento previsto para finales de año, pensando que así amortiguarían el golpe de las Vision Pro, sabiendo que Apple las daría a conocer en pocos días. Estas gafas de realidad mixta de Meta cuestan una octava parte de lo que cuestan las Vision Pro, pero eso a Apple le da exactamente igual. Ellos ni siquiera miran al resto de empresas, y se concentran en hacer el mejor aparato que creen que pueden hacer bajo su punto de vista, nunca mejor dicho. Así, en este caso han utilizado los mejores componentes que han sido capaces de conseguir, como esas dos pantallas microLED con más pixeles que una pantalla 4K, como esas 12 cámaras, multitud de sensores y micrófonos, varios procesadores, etc. No han mirado su precio. Simplemente han intentado fabricar lo que ellos llaman el más avanzado dispositivo electrónico personal jamás fabricado. No lo dicen sin convicción, realmente lo creen. Saben que tienen algo importante sobre la mesa y que esta es su primera versión. Hay que empezar por algún lado en una nueva industria para ellos.
Por esa razón, ahora mismo el precio no les importa. Esta es la estrategia que han decidido tomar inicialmente. Cuando Apple anunció el primer Macintosh original en los 80, costaba algo así como 7000 dólares de hoy en día, si tenemos en cuenta la inflacción. Era muy caro, pero fue un ordenador que cambió la industria porque era revolucionario. Estas gafas de realidad mixta Vision Pro empujan los límites de lo que era posible hasta ahora, con una serie de tecnologías conjuntadas perfectamente que consiguen algo que hasta hace poco muchos usuarios pensaban que era ciencia ficción. Esta es la sensación que uno tendrá cuando se ponga las Vision Pro por primera vez. Se pensará Wow, esto es algo realmente puntero y diferente. Les volará la cabeza, como se la voló la primera vez que vieron un iPhone en el 2007, o un Macintosh en 1984.
Iteración continua
Así, con este punto de partida, Apple entra en una nueva industria, la de la realidad virtual, y en el futuro harán lo que ya sabemos que hacen siempre. Iterar e iterar. Mejorar lo que ya tienen, y ofrecer mejoras en sucesivas versiones de las Vision Pro. También, viendo ese nombre, es muy probable que algún día lancen unas Vision Air, y quizás algún vía saquen las Vision Air 5, y serán seguramente menos caras. Estas Vision Pro que acabamos de ver son sólo la primera versión de la rama profesional de sus gafas.
A pesar del precio, estamos seguros de que van a vender bastantes cuando estén disponibles el año que viene. Fabricar este dispositivo tampoco debe ser fácil, con placas bases colocadas en un ángulo, chips custom como ese R1, y pantallas microLED que no sabíamos que ya se podían fabricar en masa. Con esa forma que tienen, seguramente fabricarlas será un reto enorme para la empresa OEM que está al cargo de ensamblarlas, y seguro que aún tendrán muchos problemas para incrementar el ritmo de producción de aquí hasta el comienzo del año que viene, que será cuando se pongan a la venta. De nuevo, Apple hace que estas cosas parezcan fáciles, pero no lo son.
No serán un producto masivo por el precio que tienen, sin duda, pero muy probablemente sí que serán un producto que de beneficios a medio y largo plazo. Futuras iteraciones menos caras harán que empiece a ser comprado más habitualmente por personas que hasta entonces nunca se habían planteado tener unas gafas así. Por ejemplo, para alguien que viaje mucho, con varias baterías en la mochila, pasar un vuelo de 10 horas con estas gafas viendo películas como si estuviera en un cine ignorando completamente todo lo que tenga a su alrededor, va a ser sin duda uno de los usos más habituales. Por eso mostraron este ejemplo repetidamente en el vídeo de presentación de las Vision Pro.
Poder grabar un vídeo en 3D, es especial también. Las Vision Pro es el primer dispositivo de Apple capaz de grabar y reproducir un vídeo en 3D. No es el 3D de los videojuegos, sino un 3D que te hace sentir que realmente estás ahí delante, porque dos cámaras graban lo que tienes delante, y luego dos pantallas reproducen los dos vídeos, uno para cada ojo. Tener recuerdos y volverlos a vivir como nunca antes ahora será posible con este dispositivo, simplemente pulsando un botón.
Para los que hacemos muchas fotos, y para los que grabamos muchos vídeos con nuestro iPhone, poder hacer esto a esa resolución y en 3D real es todo un sueño. Son cosas que no se podían hacer antes, con prácticamente ninguna cámara, y las que hay de cine sin duda cuestan mucho más que unas Vision Pro.
Esta funcionalidad sólo, hará que para muchos usuarios, esos 3500 dólares merezcan mucho la pena. Pero esperemos a ver los resultados de ventas cuando finalmente estén disponibles.
A los que pensaban que Apple no podía innovar más
A todos los que pensaban que en Apple se había dejado de innovar o que no volverían a ser los mismos tras el adiós de Steve Jobs, tienen hoy que pensar el esfuerzo que habrá costado conseguir que todos estos sensores arrojen un patrón de luz infrarroja sobre el iris del usuario para determinar un patrón único y verificar su identidad de manera completamente automática, con Optic ID.
Este tipo de cosas realmente requieren de muchos miles de millones de dólares en inversión, prototipos, pruebas y más pruebas… de nuevo, Apple hace que parezca fácil. Simplemente dedican 20 segundos de un vídeo a decir reconocemos al usuario por su iris único, lo hemos llamado Optic ID, y pasan página en la presentación, pero esto es realmente difícil de conseguir.
Es sólo un ejemplo de que la innovación en Apple no ha cesado, ni mucho menos. Siguen haciendo cosas que no están al alcance de las demás empresas. ¿Vemos a Meta pensando en un sistema de identificación biométrica del usuario por su Iris? no, ¿verdad? – bueno pues eso es porque en Apple pueden innovar como en ninguna otra empresa. Acaban de demostrarlo. Con hechos. Con un nuevo dispositivo increíble desde un punto de vista tecnológico. Han vuelto a conseguir que nos quedemos con la boca abierta. Ninguna otra empresa de la industria de la electrónica de consumo ha conseguido ese efecto de manera repetida y consistente, precisamente por que ninguna otra empresa a día de hoy innova como Apple en electrónica de consumo. Es así de sencillo.