Apple ha decidido donar 10 millones de dólares a una empresa que fabrica kits de pruebas PCR para detectar el nuevo coronavirus causante de la enfermedad COVID-19 que arrasa el mundo estos días.
Lo han anunciado en una nota de prensa y lo curioso de esta noticia no es la donación en sí, que podría dar cualquier empresa tecnológica de Silicon Valley sin problemas, sino el hecho de que en realidad la donación se invertirá en investigación y desarrollo para conseguir acelerar la fabricación de estos kits de pruebas.
Si hay una empresa en el mundo que es capaz de crear diseños no sólo útiles y prácticos sino que también se puedan fabricar rápidamente, esa es Apple. El iPhone es lo que es no por sólo por su aspecto, sino por el hecho de que consiguen fabricar decenas de millones de ellos en pocos meses. Eso, también es diseño – cómo está hecho por dentro, cómo se debe ensamblar, cómo se prepara todo para que en un día se puedan fabricar cientos de miles de unidades intentando reducir al máximo el número de intentos defectuosos, que no funcionan. Con estos tests de COVID-19, intentarán hacer lo mismo, y si Apple consigue que esta empresa a la que ayudan incremente su producción de unos pocos miles al día a millones a la semana, entonces probablemente en EEUU conseguirán mejorar mucho su situación porque podrán empezar a masificar las pruebas de esta enfermedad y encontrar (y aislar) a personas que están contagiadas pero aún no lo saben porque son asintomáticas. Ésta es la gran arma que tiene este nuevo Coronavirus.
Esta es una manera excelente por parte de Apple de contribuir a la lucha contra esta enfermedad. Es una pena que sólo parezca afectar a EEUU, porque este problema de los tests de COVID-19 lo tenemos muchos otros países. Actualmente la mayor parte de empresas fabricantes de estos tests están en China y algunas de de ellas no ofrecen tests con efectividad realmente garantizada, empeorando la situación en lugar de ayudar. El problema de esos tests no es que se hagan en China ni mucho menos (el propio iPhone se hace en China con una calidad excelente) sino que no todas las empresas, en todo el mundo, ofrecen los más altos estándares de calidad y pruebas que garanticen la efectividad de su producto.
La empresa a la que Apple ayuda, COPAN, expandirá su producción con una nueva fábrica mucho más grande que están construyendo en el Sur de California. Será allí donde se utilicen las máquinas que Apple ha diseñado para la fabricación de estos tests. Estas máquinas están a su vez fabricadas por otras empresas norteamericanas, de diferentes estados.