Después de comparar un iPhone 6S y un iPhone 11 Pro, es hora de hacer una comparación entre los dos smartphones más potentes que uno puede encontrar en las tiendas hoy en día; El recién lanzado Samsung Galaxy S20 Ultra y el iPhone 11 Pro. En el vídeo de abajo podemos ver una comparación de velocidad siguiendo la misma secuencia de eventos, abriendo las mismas Apps etc en ambos dispositivos. En este caso no se utiliza un robot sino que se hace manualmente, pero a pesar de eso podemos obtener una comparación bastante justa con un curioso resultado. El iPhone 11 Pro gana en la primera ronda de Apps abiertas, por una sencilla razón; Tiene un procesador mucho más potente. Sin embargo, en la segunda ronda de Apps abiertas y cerradas, gana el Galaxy S20 Ultra. ¿Cómo es esto posible?
La respuesta es muy sencilla: Es culpa de la memoria RAM.
Cuando todas las Apps se abren por primera vez, se cargan en memoria y ejecutan en ambos dispositivos. El iPhone con su CPU es más rápido y las carga más deprisa. Pero en el segundo intento, el iPhone ha tenido que liberar memoria RAM porque sólo tiene 4 GB. Para abrir otras Apps, primero hay que matar las que hay abiertas en RAM previamente. Este proceso, requiere de unos instantes que le hacen perder ventaja.
El Galaxy S20 Ultra sin embargo, tiene 12 GB de RAM. Es tres veces más que el iPhone 11 Pro. A pesar de que Android es menos eficiente con la memoria RAM que iOS, las Apps se quedan abiertas, y volver a ellas no requiere ejecutarlas nuevo. Simplemente las abre desde RAM, ya en ejecución, ahorrando tiempo. Esta es la razón por la que en la segunda vuelta de Apps que ya han sido abiertas antes, el S20 Ultra es más rápido… tiene RAM de sobra para todas ellas, algo que no se puede decir del iPhone 11 Pro.
En este caso hemos visto uno de los beneficios de tener RAM suficiente en un smartphone, en una prueba abriendo muchas Apps consecutivamente. Tenemos que tener en cuenta que a lo largo del tiempo, varios días, se acaban abriendo igualmente muchas Apps diferentes, y tenerlas cargadas en RAM ayuda a volver a ellas más rápidamente, aunque sólo sean unos pocos segundos cada día. Hacen que el sistema se sienta más ágil y rápido ejecutando aplicaciones.
Apple siempre ha sido especialmente tacaña a la hora de dotar de RAM a sus smartphones y tabletas, en claro contraste con muchos terminales Android, por una sencilla razón; Cuanta más RAM tiene un iPhone, más costoso es fabricarlo, y el iPhone ya es muy caro con la poca RAM que ponen en ellos. Con el paso de los años Apple está incrementando la cantidad de memoria RAM que tienen sus dispositivos, pero aún están muy lejos de esos 12 GB con los que viene un S20 Ultra. Es cierto que no es importante quizás para muchas personas, pero para los que quieren siempre el máximo rendimiento posible, y están dispuestos a pagar más de mil euros por eso, sí que les importa. Mucho.