Apple ha anunciado que construirán un nuevo campus de oficinas en Austin, capital del estado de Texas en EEUU.
En la nota de prensa que han publicado, podemos ver el mapa de arriba en donde se muestra el número de empleados que Apple piensa contratar para el año 2022. En el mapa, hemos añadido una flecha que señala el lugar en donde estas nuevas oficinas permitirán a Apple incrementar notablemente el número de empleados en esa zona central del país, aunque como vemos, tienen planeado incrementar su presencia notablemente por todo el país, cuando antes estaban principalmente concentrados en los estados de California y Nueva York.
Este nuevo complejo de oficinas supondrá la inversión por parte de Apple de al menos 1000 millones de dólares. En la misma nota de prensa han anunciado también nuevas oficinas en Seattle, San Diego o Culver City, además de expandir las que ya tienen en Nueva York o Boulder en el estado de Colorado. El objetivo es llegar al año 2022 con las contrataciones que se indican en el mapa que acabamos de ver, más de 20.000 nuevos puestos de trabajo.
Está claro que esta nota de prensa tiene un claro objetivo; mejorar la imagen de creación de empleo en su propio país, ante las críticas que acusan a Apple y muchas otras empresas tecnológicas norteamericanas de realizar la parte más importante de sus negocios, la fabricación de sus productos, fuera de EEUU. Por eso nos enseñan este otro mapa en donde dice que emplean 90.000 norteamericanos en los 50 estados de EEUU.
Fijémonos especialmente en la palabra norteamericanos. Está muy bien elegida, porque en Apple obviamente trabajan también muchos extranjeros, decenas de miles, pero obviamente lo que interesa resaltar en esta nota de prensa es el trabajo que dan a los ciudadanos de EEUU. Las oficinas de Austin son, de hecho, el lugar en el que más empleados de Apple hay en la actualidad después de California, con unas 6.200 personas.
En esta misma nota de prensa se menciona que Apple invertirá 10.000 millones de dólares en el desarrollo de centros de datos al o largo y ancho de EEUU, durante los próximos cinco años. 4.500 millones de dólares de esos 10.000, se invertirán entre lo que queda de este año y el siguiente. Todos serán alimentados al 100% con energías renovables.