En la cadena de despropósitos que Apple ha causado esta semana que está a punto de terminar y que hemos sufrido todos los usuarios, uno más, aunque menor, se añade a la lista. Ayer muchos usuarios vieron cómo sin haberlo tocado siquiera su iPhone empezaba se reiniciarse continuamente, cada pocos segundos, impidiendo su uso.
Apple publicó entonces la actualización a iOS 11.2 que tenía programada para la semana que viene, adelantándola al fin de semana, porque al actualizar se corrige este grave problema, causado por alguna App que utilice notificaciones locales periódicas, como por ejemplo, la App de Calendario, aunque hay otras de terceros que también lo hacen. Cuando hay una notificación de este tipo configurada y se superan las 0:15 horas del día 2 de Diciembre, empiezan los reinicios. Por qué a las 0:15 del día 2 de Diciembre y no en otro momento, es algo que probablemente nunca salga de las oficinas de Apple pero lo importante es entender que para solucionar este problema, hay que cambiar la fecha del iPhone o iPad a cualquier momento antes de ese día 2 de Diciembre a las 0:15 horas. Luego, hay que apagar las notificaciones de la App afectada. Haciendo estas dos cosas, se soluciona el problema temporalmente, y permite instalar iOS 11.2 para solucionarlo definitivamente.
Sin embargo, las cosas no podían ser tan fáciles; Cuando se cambia la hora del iPhone, muchas Apps dejan de funcionar bien. Por ejemplo, la App de Twitter se niega a cargar el timeline, y Safari se niega a cargar páginas que utilicen SSL, cuya URL empieza por https://, como es el caso de iPhoneros.com. Son sólo dos ejemplos, pero hay muchos más. Además de esos pequeños inconvenientes, hay un más, muy importante; Face ID se niega a funcionar en el iPhone X, y tras reiniciar al instalar iOS 11.2, un mensaje aparece diciendo que no es posible activar Face ID en ese iPhone. Se acepta, se pone la clave habitual, y se utiliza el iPhone normalmente… pero si lo apagamos y volvemos a encender, el candado nunca se desbloquea y nos pide siempre la clave.
Afortunadamente, la solución es rápida y sencilla; Activamos la hora automática en la App de Ajustes, para que el iPhone vuelva a tener una hora real y verdadera, lo reiniciamos, y todo vuelve a funcionar bien, tanto las Apps, como Face ID… por fin, después de una odisea de reinicios interminables y actualizaciones de iOS publicadas de manera totalmente inesperada, mientras uno intenta averiguar por qué su iPhone ha dejado de funcionar. Estos días van a pasar, sin duda, a la historia del software de Apple como unos de los más negros… está claro que Apple tiene un problema grave con el control de la calidad de su software en lo que a seguridad y comprobación de errores se refiere. Ojalá que puedan solucionarlo pronto, porque todo esto, lo sufrimos sobre todo nosotros, los usuarios.