Una nueva y curiosa patente de Apple nos muestra cómo convertir un iPhone en un portátil, con su teclado y pantalla, dejando el iPhone funcionando al mismo tiempo como el área en donde estaría un trackpad en un portátil de verdad.
La idea consiste en introducir el iPhone en un espacio reservado para el mismo, de manera que alrededor del mismo tenga un ordenador similar a un MacBook. El teclado y la pantalla del mismo pasan a ser controlados por el iPhone, que además de trackpad también pasa a utilizar su CPU y memoria… el accesorio en el que se encaja no deja de ser un simple teclado y pantalla, y quizás una batería externa, para el iPhone. La idea es muy interesante porque permite disponer de todo lo que ofrece un portátil, suponemos que con su ratón, y que un smartphone por si mismo no puede ofrecer. En la patente, no obstante, se describe que ese teclado con pantalla podría tener una GPU para ayudar al iPhone en tareas gráficas.
El procesador de un iPhone 7 es perfectamente capaz de ejecutar programas relativamente pesados y funcionar bastante rápido. Es más rápido, de hecho, que portátiles de hace sólo 4 o 5 años así que en ese sentido no habría ningún problema. El único inconveniente que le vemos a todo esto es que iOS, que es lo que nos imaginamos que haría funcionar todo el sistema porque es lo que funciona en el iPhone, no está diseñado para funcionar con un ratón, y utilizar la pantalla de un portátil con los dedos, como si fuera un iPad, haría que pronto nos cansáramos. Por esta razón, la parte del hardware, lo que nos muestra esta patente, nos gusta bastante, pero la parte del software nos parece la más difícil de conseguir.
Como todas las patentes, que Apple haya registrado esta idea o que tenga algunos prototipos funcionando en sus laboratorios de desarrollo, no significa que en el futuro vayan a vender un accesorio así… aunque sí sabemos que es una posibilidad.