Jawbone, conocida por sus pulseras de fitness, ha decidido que es hora de cerrar sus puertas al mercado de consumo. Eso quiere decir que sus pulseras de fitness dejarán de desarrollarse, fabricarse y venderse en medio mundo.
La empresa, aunque es una de las más veteranas en esto de las pulseras que miden el rendimiento deportivo, ha tenido muchos problemas desde el principio, incluso con productos que tenían defectos de fabricación y eran devueltos masivamente. Es posible que con el paso del tiempo se hayan quedado sin dinero para continuar y ahora hayan decidido darle une nuevo rumbo a la empresa, concentrándose en dispositivos para medir constantes vitales dirigidos a un mercado profesional de centros médicos. La empresa no desaparece, pero sí que lo ha de la vista de los consumidores, según nos cuentan en TechCrunch.
Es una noticia triste, pero también una oportunidad sobre todo para Fitbit y Apple, ahora mismo las dos empresas que más wearables venden en todo el mundo a pesar de tener dos enfoques radicalmente diferentes; Aunque Jawbone tenía una porción del mercado pequeña, ahora hay más espacio para los que se quedan.