Ahora que iOS 11 está aquí, empiezan a llegar las Apps de ARKit (realidad aumentada) a la nueva y rediseñada App Store. Hemos visto muchos ejemplos de lo que son capaces los desarrolladores con esta nueva librería que elimina toda la complejidad que tiene programar este tipo de aplicaciones y permite prácticamente a cualquier desarrollador publicar en la App Store una aplicación que sea capaz de analizar en tiempo real lo que hay en frente de la cámara del iPhone e interaccionar con esa información. Esto, obviamente, requiere de una velocidad de CPU importante porque hay que procesar los datos de ese vídeo que ofrece la cámara y además, hay que hacerlo prácticamente en tiempo real. Mientras tanto, encima de esa imagen se superponen todo tipo de contenidos, desde simples textos a complicados modelos 3D de personajes, por ejemplo, en un videojuego.
Debido a esa exigente capacidad de proceso necesaria, no todos los iPhones compatibles con iOS 11 pueden utilizar estas Apps. Aunque iOS 11 se puede instalar en un iPhone 5S en adelante, las Apps que utilizan ARKit sólo se pueden instalar en dispositivos que tengan al menos un procesador A9. Ese requerimiento técnico lamentablemente deja fuera al iPhone 5S, iPhone 6 o iPhone 6S.
Las Apps que ya había en la App Store que utilizaban realidad aumentada, por supuesto seguirán funcionando siempre y cuando las mantengan sus desarrolladores, pero es una realidad aumentada bastante menos exacta y potente comparada con la que ofrece ARKit. Muchos pensarán en obsolescencia programada pero probablemente no sean conscientes de la ingente cantidad de datos que hay que procesar en un vídeo de alta resolución que llegan en tiempo real y sobre el cual se superponen todo tipo de cosas… es algo que parece mágico, porque bueno, realmente lo es; es una pequeña hazaña que un pequeño ordenador que llevamos en el bolsillo sea capaz de hacer cosas así.