Apple ha recordado hoy a los desarrolladores de Apps en la Unión Europea que tienen que dar su número de teléfono,email y dirección postal para ser publicado en la App Store. Es uno de los requerimientos de la nueva ley de Mercados Digitales de la Unión Europea, que busca entre otras cosas transparencia entre la empresa que hace esas Apps y los usuarios, saltándose a Apple y la App Store por el camino. La idea es que cualquier usuario pueda contactar y pedir explicaciones directamente a cualquier desarrollador. Esta nueva regla afecta sólo a los desarrolladores que cobren un dinero por su App, ya sea al descargar o con pagos integrados.
Esto supondrá una carga de trabajo extra sobre todo para los que consigan una App con muchas descargas, que además de atender las contestaciones de las reseñas en la App Store tendrán que responder también los emails o incluso llamadas de teléfono que les lleguen sobre sus Apps.
Las Apps nuevas que se envíen a revisión para publicar en la App Store ya deben llevar esta información, y a partir del 17 de febrero de 2025 las Apps ya publicadas que no tengan esta información serán eliminadas de la App Store, sólo en la Unión Europea. Apple y obviamente muchos pequeños y medianos desarrolladores no quieren que les impongan este cambio. Las cosas fuera de la Unión Europea seguirán igual que hasta ahora, lo que podría ocasionar que muchos desarrolladores decidan, simplemente, no publicar sus Apps en ninguno de los países de la Unión Europea.
Si a esto sumamos el hecho de que Apple Intelligence tampoco estará disponible en la Unión Europea ante la incertidumbre que supone para Apple saber si les van a multar o no por reglas como mantener los datos de los usuarios físicamente alojados en servidores de la Unión Europea y otras exigencias de este tipo, el resultado será que casi toda Europa se verá retrasada en algunos aspectos del desarrollo tecnológico. En la Comisión Europea se piensan que para las empresas es imprescindible hacer su negocio en la Unión Europea, pero se equivocan. El tiempo dirá si nos equivocamos.
