Una de las dudas que muchos nos preguntamos sobre el nuevo sistema de identificación biométrico del iPhone X, Face ID, es si realmente puede hacer olvidar lo bueno que es Touch ID. Nos hemos acostumbrado a ese sensor de huelas dactilares tan rápidamente que ahora cuesta imaginar dejar de utilizarlo. En las primeras pruebas reales en las que podemos comparar Touch ID en un iPhone 8 o 7 con Face ID en un iPhone X, se ha podido confirmar que, efectivamente, Touch ID es más rápido que Face ID. Sin embargo, en el uso diario, puede resultar más rápido porque para ciertas tareas, como por ejemplo abrir una notificación que acaba de llegar, Face ID es considerablemente más rápido. En este vídeo, podemos ver precisamente esa interacción y comparar la misma acción con Touch ID y con Face ID.
Here. Let me show you in a video what I mean that Face ID in use is different than Face ID artificially clocked. pic.twitter.com/1jvU2f5vC2
— Matthew Panzarino (@panzer) 1 de noviembre de 2017
Como vemos, Face ID es claramente más rápido ya que con Touch ID es necesario poner el dedo sobre el botón Home para desbloquear el sistema, mientras que Face ID empieza a funcionar antes, tan pronto levantamos el iPhone X, para el momento en el que hacemos el gesto sobre la notificación que queremos abrir, el sistema ya está desbloqueado. Esto le da una ventaja al sistema de reconocimiento facial del iPhone X sobre Touch ID en un iPhone 8 o 7.
Sin embargo, si nos fijamos sólo en los números, Face ID es un poquito más lento que Touch ID, teniendo en cuenta sólo el tiempo que se tarda en desbloquear sin más el iPhone. Concretamente, en un iPhone 7 Plus Touch ID permite llegar al Springboard (pantalla de iconos de Apps) en 0,91 segundos, mientras que Face ID en un iPhone X requiere de una media de 1,48 segundos, aunque tarda sólo 1,16 segundos si contamos desde que la pantalla se enciende, en lugar del momento en el que tomamos el iPhone X y lo levantamos para que automáticamente se encienda la pantalla, con esta opción activada en la App de Ajustes.
En definitiva, si nos olvidamos de que Face ID está ahí y simplemente cogemos el iPhone X y deslizamos hacia arriba, ya estará desbloqueado en la inmensa mayoría de veces. Si lo configuramos para tener que tocar en la pantalla o usar el botón de encendido, tardaremos un poquito más, pero en cualquier caso, continúa siendo muy rápido. De hecho, es más rápido que la primera generación de Touch ID utilizada en el iPhone 5S y 6. La segunda generación de ese sensor de huellas dactilares en el iPhone 6S, 7 u 8, es considerablemente más rápida. Face ID se sitúa en un punto entre esa primera y segunda generación de Touch ID. Para ser un nuevo sistema, en su primera generación, no está nada mal.
Vía: Tomsguide.