Vladimir Putin ha firmado una nueva legislación que obliga a los fabricantes de smartphones como Apple a pre-instalar una serie de Apps en todos los smartphones que venden. Por supuesto, estas Apps son decididas por el gobierno ruso. Esto les obliga a instalar sus Apps si quieren vender el iPhone en Rusia, así que esta noticia puede tener repercusiones muy serias para Apple porque lo más probable es que se nieguen a hacerlo, a pesar de las últimas concesiones que han hecho precisamente al gobierno de ese país.
Esta nueva ley entrará en vigor en el mes de Julio del año 2020, así que aún hay tiempo para que ocurran muchas cosas. La idea detrás de esta ley, según los políticos rusos, es ayudar al cliente a no tener que descargarse Apps nada más comprarse un smartphone nuevo, y también ayudar a las empresas tecnológicas rusas que hacen esas Apps pre-instaladas. La noticia ha saltado en la agencia de noticias Reuters.
Aparentemente Apple ya ha contestado a una web rusa (traducción automática de Google) que pre-instalar esas Apps desde el inicio sería lo mismo que hacerle el Jailbreak al iPhone, comprometiendo su seguridad. Obviamente, se refiere a Apps que no han sido verificadas por ellos y por lo tanto suponen un riesgo de seguridad, que es por otro lado lo que muy probablemente están buscando en el gobierno ruso, simplemente una manera de meter mano a datos de smartphones si hiciera falta. En esas mismas declaraciones dicen que Apple no puede tolerar ese riesgo. En ese caso, suponemos, dejarían de vender el iPhone en Rusia, y eso, supondría perder un enorme mercado que, si bien no es el más grande para Apple, no se puede negar que es importante porque se trata de un enorme país con muchos millones de personas.
Esta nueva ley no cubre sólo smartphones, sino también tabletas y ordenadores, así como Smart TVs así que el lío está servido, porque también en Rusia, muy seguramente muchos usuarios estarán en contra de esta ley. En el pasado, el gobierno ruso ya ha intentado y conseguido en algunos casos que las compañías de mensajería instantánea alojen sus servidores en territorio nacional y al mismo tiempo provean de las llaves de des-crifrado de datos para poder leer conversaciones ajenas si así lo requieren.